Por: Rafael Llanes
(ZENIT Noticias / Roma, 01.06.2023).- El Vaticano dio a conocer el 13 de septiembre de 2018 la autorización para investigar las posibles irregularidades financieras en el famoso coro de la Capilla Sixtina. Un grupo de sus magistrados conduce la investigación, iniciada hace meses, y estudia los supuestos manejos irregulares del dinero que da sustento al coro.
Las pesquisas de la magistratura civil del Estado Vaticano investigan a Massimo Palombella, director del coro, y a Michelangelo Nardella, director administrativo. Se sospecha que utilizaron el dinero obtenido por algunos conciertos que da el grupo musical, el cual se depositó en una cuenta abierta de una banca italiana.
Los cargos imputados a tres acusados en el proceso penal son malversación, blanqueo de capitales y fraude en la gestión económica del coro, que da servicio musical en las celebraciones litúrgicas en el Vaticano. El coro se compone de 55 personas: cantores adultos, otros profesionales de la música, algunos empleados vaticanos y adolescentes, los Pueri Cantores.
Las investigaciones sugieren que el dinero de los conciertos se usó para gastos personales de los dos directivos. Las autoridades vaticanas, además, nombraron un visitador apostólico para indagar sobre la causa del descontento proveniente de algunos padres de los niños cantores sobre el trato verbal del maestro del coro.
La sala del Tribunal Estatal de la Ciudad del Vaticano finalizó el 24 de mayo de 2023 la primera audiencia, con número de Protocolo 30/18, del proceso penal contra Monseñor Massimo Palombella, Michelangelo Nardella y Simona Rossi, esposa del segundo acusado, por la gestión de los fondos de la Capilla Musical Pontificia «Sixtina» durante su desempeño en los cargos
El abogado defensor de Michelangelo Nardella, Lauro Sgrò, expresó ante el Presidente del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, Giuseppe Pignatone, la «nulidad e inutilidad de las pruebas ilegalmente adquiridas» que aparecen en el informe presentado por la Prefectura de la Casa Pontificia a la Autoridad de Supervisión e Información Financiera. Aseveró también que la competencia en el caso correspondía a la Oficina del Auditor General.
La defensa del Sacerdote salesiano indició la existencia de «un uso sin escrúpulos de la firma de Monseñor Massimo Palombella por parte de Michelangelo Nardella», y presentó una demanda contra éste, pero la Oficina del Promotor de Justicia solicitó su desestimación con argumentos a cada excepción presentada.
El presidente del Tribunal fijó la próxima audiencia para el 12 de junio. Se escuchó el testimonio de Monseñor Georg Gänswein, arzobispo titular de Urbisaglia y prefecto de la Casa Pontificia, como testigo. La responsabilidad del Coro dependía del Prefecto de la Casa Pontificia hasta el 17 de enero de 2019, día en que pasó al Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias por la Carta Apostólica en forma de Motu Proprio sobre la Capilla Musical Pontificia.
El Papa Sixto IV, en 1471, creó el Colegio de los Capellanes Cantores, primer núcleo de la Capilla Sixtina o Capilla Musical Pontificia. La Iglesia siempre ha dado alto valor a la música y demás artes al servicio de la fe, con bases sólidas en los datos bíblicos y la tradición de las comunidades cristianas desde la Iglesia primitiva. El coro de la Capilla Sixtina heredó la práctica de la Schola Cantorum Romana, fundada por San Gregorio Magno en el siglo VI.
El coro realizó algunas giras excepcionales en los últimos años por Estados Unidos y el Reino Unido. Palombella ocupaba el cargo de director del coro desde octubre de 2010, nombrado por el Papa Benedicto XVI. Fue confirmado por el Papa Francisco, tres años atrás. Aclarar y juzgar los malos manejos económicos no rebaja la calidad artística y el servicio litúrgico de una institución con muchos siglos de valor.