Se trata de cuatro días dedicados a la oración y al intercambio cultural. El programa, que comienza el 4 de agosto, prevé una etapa en Nazaret, en peregrinación a la Basílica de la Anunciación. El encuentro se concluirá en Belén, el 8 de agosto, con una marcha hacia la Basílica de la Natividad, y con una gran fiesta internacional.
