CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 16 enero 2005 (ZENIT.org).- Juan Pablo II impulsó este sábado el diálogo con los cristianos luteranos al recibir en el Vaticano a una delegación ecuménica finlandesa que llegó a Roma para celebrar la fiesta de su santo patrón, san Enrique.
«Recuerdo con alegría las numerosas visitas de la delegación ecuménica finlandesa al Vaticano. Demos gracias por las cálidas relaciones que existen entre la Iglesia católica, la Iglesia ortodoxa finlandesa y la Iglesia Evangélico-luterana de Finlandia», afirmó el Santo Padre.
«Con el pasar de los años, nuestro diálogo se ha reforzado con las visitas mutuas, con las oraciones compartidas y, de manera particular, con la Declaración Conjunta sobre la Justificación», firmada entre la Iglesia católica y la Federación Luterana Mundial en octubre de 1999.
«Todo esto subraya el significante progreso que hemos realizado en la búsqueda de una unidad plena entre los cristianos», añadió el Santo Padre.
«En estos momentos en los que los finlandeses celebran juntos 850 años de cristianismo, os aliento a edificar vuestras vidas sobre las raíces de Europa, tan vitales para el futuro de este continente», concluyó.
San Enrique fue el primer obispo de Finlandia, país en el que actualmente los luteranos representan el 85,7% de una población de 5 millones de habitantes.