El alférez Simone Cola, de 31 años, casado y con una niña de 8 meses, falleció en Nasiriya, al sur de Bagdad, al ser alcanzado por un disparo cuando patrullaba en helicóptero el río Éufrates.

Un telegrama enviado en nombre de Juan Pablo II por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, a monseñor Salvatore Boccaccio, obispo de Frosinone-Veroli-Ferentino, transmite a los padres y familiares del militar «su sentido pésame» que afecta a «todo el país».

El Papa asegurar sus oraciones de sufragio por la «joven víctima» fallecida en «el cumplimiento de su misión de paz» e invoca el «consuelo celeste» para su esposa (menciona su nombre, Alessandra) y su hija (Giorgia).