Un comunicado del arzobispo de Westminster, publicado este lunes, ha aclarado que «es demasiado pronto para decir incluso en qué consistirá la visita, o si será posible, dados los compromisos del Papa y las numerosas invitaciones que ha recibido de todo el mundo».
Ahora bien, el presidente de la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales, el cardenal Cormac Murphy-O’Connor, «está muy contento de que comunicar al Papa la alegría que experimentaría el pueblo británico en caso de que pudiera aceptar», afirma el comunicado.
Austen Ivereigh, director de comunicación de la archidiócesis de la capital británica, ha aclarado que «es poco probable que la visita papal pudiera coincidir con el vigésimo quinto aniversario de la visita de Juan Pablo II en mayo de 1982» a este país, pues se ha anunciado que en mayo de 2007 el Santo Padre viajará a Aparecida (Brasil) para inaugurar la quinta Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (CELAM).
En este mismo día, la Conferencia Episcopal de Escocia, también ha expresado su esperanza en que «este posible viaje incluyera una visita» a sus tierras.
El presidente de esa Conferencia Episcopal, el cardenal Keith O’Brien, explica en un comunicado: «En caso de que el Papa pueda aceptar la invitación de los obispos de Inglaterra y Gales, la Conferencia Episcopal de Escocia extenderá una invitación pidiendo al Papa que pase algo de tiempo en Escocia, donde recibiría la más cordial bienvenida».