CARACAS, domingo 21 de septiembre de 2008 (ZENIT.org).- La arquidiócesis de Caracas ha exigido al Gobierno y al Ejército devolver la capilla de la Iglesia católica que ha sido confiscada para entrenar a niños de 8 a 14 años en las Brigadas Infantiles y Juveniles de la Reserva.
Según un comunicado emitido por los obispos auxiliares de la capital venezolana, monseñor Luis Armando Tineo y monseñor Nicolas Bermúdez, se trata de la capilla "Jesús de la Divina Misericordia", que había sido bendecida el 16 de diciembre del 2000 y confiada a las Hermanas Misioneras Lauritas.
"El domingo 7 de septiembre, terminada la celebración dominical un "teniente de la Reserva, que según testigos se llama José Luis Villaida, ordenó a las hermanas y a la comunidad de los fieles que debían desalojar la capilla porque en adelante ésta sería destiada a la formación o entrenamiento de Brigadas Infantiles y Juveniles de la Reserva, integradas por menores de 8 a 14 años".
Los prelados denuncian que, "según el testimonio de vecinos, la capilla esta siendo utilizada para actividades con menores hasta altas horas de la noche".
Al mismo tiempo, la arquidiócesis de Caracas expresa "su más enérgica protesta por la ocupación de un lugar sagrado dedicado al culto religioso".
Los obispos manifiestan, al mismo tiempo, "su asombro y preocupación por la evidente utilización de menores de edad para llevar a cabo esta inaceptable ocupación".
La arquidiócesis exige "a las autoridades competentes del Municipio Sucre, del estado Miranda, del Ejecutivo Nacional y del Componente de la Reserva de las Fuerza Armada Nacionales, a inmediata devolución de la Capilla a la legítima autoridad de la Arquidiócesis de Caracas".
Igualmente exige "el respeto a los derechos de los niños según las leyes nacionales e internacionales vigentes".