CIUDAD DEL VATICANO, viernes 6 de febrero de 2009 (ZENIT.org).- El Vaticano ha desmentido hoy en una breve nota que haya existido una llamada de teléfono del Secretario de Estado, cardenal Tarsicio Bertone, al Primer Ministro italiano Silvio Berlusconi, para impedir que se le retirara a Eluana Englaro la sonda para la alimentación y la hidratación.

En una declaración hecha pública hoy, el portavoz Vaticano, padre Federico Lombardi, ha afirmado: "Se desmiente de la forma más categórica lo publicado, con evidencia, esta mañana por un diario italiano a propósito de una presunta llamada telefónica entre el Secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone, y el Presidente del Consejo italiano, honorable Silvio Berlusconi".

"La noticia es totalmente infundada", subraya el director de la Sala Stampa vaticana.

En un artículo publicado este viernes en el diario "La Stampa", se afirma que hace dos días, el cardenal Bertone habría llamado a Berlusconi para manifestar las preocupaciones de la Iglesia sobre el caso de la joven en coma vegetativo desde hace 17 años, definiendo como "delito contra la humanidad" su eventual muerte por privación de alimento y agua.

Las "presiones" de la Igelsia, afirma el artículo, sería uno de los puntos considerados por el Consejo de Ministros convocado este viernes por la mañana en el Palacio Chigi para discutir una serie de decretos y propuestas de ley de administración ordinaria, entre ellos, un decreto ley para impedir a cualquier persona cesar el suministro de alimentación e hidratación a este tipo de pacientes, que ha sido aprobado por unanimidad.

El presidente de la República Giorgio Napolitano ha enviado una carta a Berlusconi, que se ha leido en el Consejo de Ministros, para expresar su perplejidad sobre la oportunidad de utilizar un decreto ley para intervenir en el caso Englaro.

Mientras tanto, en la residencia "La Quiete" de Udine, procede sin interrupciones el protocolo para disminuir progresivamente la hidratación y la alimentación que mantienen con vida a Eluana.