ROMA, martes 6 marzo 2012 (ZENIT.org).- La comisión de cardenales y obispos pertenecientes a la Congregación de la Causa de los Santos que se ha reunido este martes en Roma aprobó con voto unánime que el siervo de Dios, Félix Varela, patriota y sacerdote cubano, pase a ser venerable.
Ahora el prefecto de la Congregación de la Causa de los Santos, el cardenal Angelo Amato, deberá presentar el parecer de los cardenales y obispos a Benedicto XVI para que su santidad autorice a la Congregación a emanar el decreto.
Lo indicó este martes a ZENIT el postulador general de la causa de Félix Varela, el hermano lasallano Roberto Meoli, muy contento por la culminación de esta parte del proceso. "Con la aprobación de la comisión de Cardenales y obispos y después que papa apruebe, la Congregación de la Causa de los Santos emanará el decreto sobre las virtudes heroicas super virtutibus del siervo de Dios Félix Varela, que lo promueve a Venerable".
“La comisión de cardenales y obispos --prosiguió Meoli- ha constatado después de tomar en cuenta el parecer de la comisión teológica, que el padre Varela practicó las virtudes en grado heroico”.
Y recordó que “el mismo día que el papa autorice al cardenal Amato, la noticia será dada a conocer en L'Osservatore Romano, probablemente junto con otras causas llevadas por el cardenal al papa”.
El hermano Meoli recordó que apenas el obispo de una diócesis firma el decreto de introducción de una causa, el candidato pasa a ser siervo de Dios, después de que, si es declarado venerable, entonces será necesario un primer milagro para pedir la beatificación y un segundo milagro para la canonización.
El padre Felix Varela
El padre Varela es considerado uno de los forjadores de la nación cubana. Nació La Habana en 1788 y a los 23 años es ordenado sacerdote en la catedral de La Habana.
A los veinticuatro años es nombrado profesor de filosofía, física y ética en el seminario de la capital. Allí prepara el primer laboratorio de Física y Química del país.
En la historia de la cultura cubana el padre Félix Varela ocupa un lugar de absoluta preeminencia por su contribución al desarrollo de la cultura nacional, por su acentuado patriotismo y su preclara virtud. Fue profesor, educador y modelo de piedad para sus discípulos. En 1821, con 34 años, fue elegido diputado y mandado como representante de Cuba a las Cortes de Madrid.
Las tres propuestas de ley que hizo durante su estadía en España fueron: de un Gobierno para las provincias de ultramar; la independencia y la abolición de la esclavitud.
En Madrid organiza un grupo con los demás representantes de las provincias españolas de ultramar para mejorar la defensa de los derechos comunes.
No logró hacer pasar ninguna de dichas propuestas y tras la restauración del absolutismo real en 1823 tuvo que dejar España; no pudiendo volver a Cuba se exilia en Estados Unidos, desde donde en Nueva York, continuó su batalla.
Fue un sacerdote ejemplar, realizó escuelas, construyó iglesias y evangelizó a los pobres e inmigrantes ayudándoles a integrarse. Falleció en Estados Unidos, el 25 de febrero de 1853.
Nacido en el paso crucial de dos siglos, supo hacer propias las inquietudes ante los interrogantes de la razón preservando la esencia de la cultura cristiana y al mismo tiempo abriendo a las nuevas exigencias del pensamiento.
Sobre las provincias de ultramar, escribió: “Las leyes se humedecen y debilitan atravesando el océano y a ellas las sustituye la voluntad del hombre”.
Su cuerpo reposa en el Aula Magna de la Universidad de La Habana.
En 1981, el gobierno di Cuba crea la Orden Félix Varela, como el mayor galardón del país.
Por H. Sergio Mora