El papa Francisco recibió este martes al metropolita Hilarión de Volokolamsk, presidente del Departamento para las Relaciones Exteriores del Patriarcado de Moscú, en una audiencia celebrada en la Casa Santa Marta. Durante el encuentro, el metropolita transmitió al santo padre “los saludos y los buenos deseos” del patriarca Kirill de Moscú.
En la reunión, que se celebró “en un ambiente de comprensión mutua”, se abordaron diferentes aspectos sobre las relaciones entre ortodoxos y católicos, informa la Web oficial del Departamento de Relaciones Exteriores de la Iglesia ortodoxa rusa.
Uno de los principales temas tratados en el encuentro fue la situación actual de la población cristiana en Medio Oriente. En este sentido, Hilarión de Volokolamsk agradeció al santo padre “sus esfuerzos” para proteger a los cristianos sirios y denunciar sus sufrimientos.
Asimismo, el ‘ministro de Exteriores’ del Patriarcado de Moscú informó al pontífice sobre su reciente viaje al Líbano y le transmitió la preocupación de los cristianos por su futuro en esta región.
Ante la dramática situación que viven estas comunidades, el papa Francisco y el metropolita Hilarión destacaron la necesidad de “acciones consolidadas” de ambas Iglesias para la protección de los cristianos.
Otro de los ámbitos de cooperación más importantes entre el Patriarcado de Moscú y la Santa Sede es “la defensa conjunta de los valores familiares tradicionales”, reconocieron ambas partes. No en vano, el metropolita intervendrá esta mañana en una jornada ecuménica, organizada conjuntamente por el Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos, el Departamento para las Relaciones Exteriores del Patriarcado de Moscú y el Pontificio Consejo para la Familia, sobre el tema «Los ortodoxos y las católicos juntos por la familia».
Tras la reunión , Hilarión de Volokolamsk regaló al pontífice una cruz pectoral, realizada en los talleres del Patriarcado de Moscú, y el primer volumen de la edición italiana de su libro «Ortodoxia». Por su parte, el papa Francisco entregó una medalla conmemorativa de su pontificado a todos los miembros de la delegación de la Iglesia ortodoxa rusa.