El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social y obispo de Gualeguaychú, monseñor Jorge Lozano, mantuvo un encuentro con el gobernador bonaerense Daniel Scioli para dialogar sobre las aportaciones que la Iglesia ha realizado al combate del tráfico de estupefacientes mediante el documento El drama de las drogas y el narcotráfico (ver http://www.zenit.org/es/articles/los-obispos-argentinos-abordan-el-drama-de-la-droga-y-el-narcotrafico)
El prelado y el gobernador compartieron la visión de una necesaria educación y condiciones de vida dignas para prevenir el consumo, la asistencia a los adictos y las formas de combatir el narcotráfico, según anuncia la agencia AICA.
Durante la reunión, monseñor Lozano, Reyser y De Piero insistieron en la necesidad de la implementación de la Ley Nº 26.586 que crea el Programa Nacional de Educación y Prevención sobre las Adicciones y el Consumo Indebido de Drogas.
La gobernación informó que el encuentro se desarrolló en la sede porteña del Banco Provincia. Se trató de un encuentro que complementó la cumbre que el Scioli mantuvo la semana pasada con los obispos bonaerenses, y en el que reafirmó el agradecimiento a la tarea eclesial. Durante la charla pudieron conversar sobre los jóvenes, la asistencia a los adictos y el delito del narcotráfico.
El prelado y el gobernador compartieron «la visión de una necesaria educación y condiciones de vida dignas, con trabajo estable y un proyecto de vida para prevenir en los jóvenes conductas autodestructivas que los conduzcan al consumo de drogas». También «hablaron de la asistencia a los adictos, destacando la labor de los centros barriales que garantizan cercanía a los adictos y sus entornos socioafectivos, y las formas de combatir el narcotráfico».
Monseñor Lozano calificó el encuentro como “muy fructífero”, y añadió que estos encuentros son muy buenos, «ya que compartimos inquietudes y vemos la manera de establecer marcos de cooperación que permitan abordar una problemática tan seria”.
Por su parte, Scioli agradeció la preocupación social de la Iglesia y el trabajo que se realiza a través de sacerdotes, religiosos y agentes pastorales, tanto en capillas como en parroquias. «Los aportes eclesiales son una guía de trabajo porque tienen la sensibilidad de llegar a lo más profundo de cada barrio y familia», afirmó el gobernador bonaerense.
(RED/RL)