Una cumbre de cuatro días contra la violencia sexual en los conflictos con la participación de ministros de más de cien países inició el martes 10 en Londres y concluirá este viernes. Poco antes del iinicio de la misma el papa Francisco con un tuit en inglés indicó:»Oremos por todas las víctimas de la violencia sexual en situaciones de conflicto y por los que combaten tal crimen. #TimeToAct».
Entre los objetivos está lograr que los dos tercios de las naciones que adhirieron hace seis meses a la ‘Declaración de Compromiso para poner Fin a la Violencia Sexual en los Conflictos’, permitan un protocolo que contempla nuevas medidas que presionen a las naciones que los cometen o permiten, y que sean considerados crímenes de lesa humanidad.
También quiere alentar la formación de los soldados y de las fuerzas de paz en la prevención de la violencia sexual y asistir incluso economicamente a las víctimas, muchas de las cuales además del rechazo social tienen que enfrentar enfermedades incurables como el sida.
El ministro de Exteriores británico, William Hague y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, hablarán este viernes al concluir la cumbre. En cambio el secretario general de las Naciones Unidas, el coreano Ban Ki Moon, lo hará por videoconferencia.
El ministro de Exteriores británico indicó que nunca antes se había organizado una cumbre de este tipo y elogió la participación de la actriz y activista Angelina Jolie, para sensibilizar sobre el tema. Kerry por su parte subrayó que los responsables de la violencia deben saber que «no pueden actuar con impunidad».
Participarán además centenares de representantes de la sociedad civil y grupos defensores de los derechos humanos que darán espacio a algunas de las víctimas.
Los datos son escalofriantes: según las estimas de UNICEF, una media diaria de 36 mujeres y niñas son violadas en la República Democrática del Congo, y se calcula que el número de víctimas de la violencia sexual desde finales de los años noventa en ese país llegue a las 200 mil personas. Para no hablar del conflicto de los Balcanes en donde la violencia sexual fue utilizada para aterrorizar a la población y producir desplazamientos étnicos. Y ahora en Siria en donde los casos de este tipo siguen verificándose.
Se ha criticado también que en muchos países donde se han registrado este tipo de delitos, debido a amnistías posteriores, los mandantes y los ejecutores hayan quedado en libertad.
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