Este domingo 13 de julio es la final por la Copa del Mundo 2014, entre Alemania y Argentina. Que en el Vaticano vivan el papa emérito Benedicto XVI, alemán; y el actual pontífice Francisco, argentino, ha hecho pensar a muchos y también dio lugar a tantos graffiti e historias divertidas.
Por si hubiera alguna duda de que no existen rivalidades de este tipo, el papa Francisco envió hoy sábado un tuit: “Los Mundiales lograron el encuentro de personas de varias naciones y religiones. Que el deporte promueva siempre la cultura del encuentro”.
Mientras en las religiones paganas, el resultado se hubiera resuelto en el Olimpo, dependiendo por así decir de quien en la tierra encendía más velas o rezara más, para el cristiano la lógica de Dios es muy diversa, iniciando por la gratuidad, el don, el dar sin recibir.
Días atrás se vivió una cierta expectativa cuando fue la semifinal entre Argentina y Suiza, con los guardias y el Santo Padre. Alguien aseguró que el Papa bromeó diciendo ‘será guerra’… ZENIT interrogó ‘de pasada’ en ese momento a algunos guardias, quienes no se mostraron particularmente tomados por el problema. Y después del partido no faltaron los graffiti que corrieron en las redes sociales, entre los cuales, la guardia suiza con un nuevo uniforme a rallas celestes y bancas.
Este domingo el derby se traslada a los dos papas. Interrogado esta semana el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, padre Federico Lombardi, sobre la posibilidad de que Benedicto y Francisco pudieran ver el partido indicó: “No me parece verosímil que lo puedan mirar juntos”, y precisó “no pienso que Benedicto XVI pueda ponerse a mirar el partido”.
Reconoció entretanto que con el papa Francisco “habría más probabilidad que con Benedicto”, si bien reiteró que no es seguro, aunque probablemente “se informará”. Y concluyó recordando que los papas “son personas superiores y dicen siempre: «que gane el mejor»”.
También la Radio Vaticano entró en el tema y publicó a propósito de este ‘derby’ una entrevista a dos sacerdotes jesuitas, el argentino Hugo Ortiz, y el alemán Bernd Hagenkord, responsables de los programas en español y alemán de la emisora pontificia. Y dieron algunos puntos de referencia interesantes, más allá de los cambios de opinión y bromas, como cuando el jesuita alemán dice en español: ‘venceremos’.
El padre Ortiz ha indicado que normalmente “Francisco no mira la televisión, no la tiene en su departamento”, ubicado en la residencia Santa Marta. Aunque precisa que el papa emérito Benedicto sí la tiene. Y riéndose concluye que “quizás lo invitará a mirar el partido, o quizás en vez de mirarlo irán a la capilla a rezar, uno por Alemania y el otro por Argentina”.
El sacerdote alemán recordó también que “Benedicto no es un ‘hincha’ del fútbol. Francisco es ‘hincha’ pero se va a dormir temprano. No se si mirará el partido, quizás sí…”.
Y Padre Ortiz concluye recordando sobre su país el Papa tiene otros pensamientos: “Francisco está muy preocupado por la Argentina, en donde hay una situación social y económica muy particular, donde hay tanta gente que sufre tanto. Pienso que Francisco no quiere que esto sea una distracción… Es importante hacer ver que nosotros somos buenos, que hemos llegado a la final y que si la copa será nuestra o de otros es solamente un juego. Ahora tenemos que demostrar que somos capaces, y que debemos superar todos los problemas con fraternidad, con el encuentro, con el diálogo y con la búsqueda del bien común para todos”.
En la conclusión el jesuita argentino recuerda que “el deporte hace ver la hermandad que nos une”, mientras que el sacerdote alemán indica: “Este deporte más nos une de lo que nos separa. ¡Y la final es final. Será un hermoso partido!”.