En la clausura del XVI Congreso Católicos y Vida Pública, el abogado y exministro de Desarrollo Social en Chile (2013-2014), Bruno Baranda, ha señalado este domingo que “la familia, como institución social, tiene un ideal y sigue siendo un ejemplo del mensaje de Cristo”. Además, ha recordado que la familia “es la primera escuela del individuo: moldea nuestro carácter y espíritu; y la de nuestros hijos”. Por este motivo, ha insistido en la necesidad de que “seamos coherentes y realistas, al configurar nuestra propia familia en base a nuestros principios”.
Baranda ha advertido también de que el gran reto que tiene la familia en la actualidad es cumplir su misión en un mundo de cambios, de crisis y ha apelado a que “debemos afrontarlos con valores y referentes, para lo que es necesaria una sólida formación”.
Por su parte, el arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, ha manifestado su gratitud por la vocación del matrimonio y de la familia en la doctrina cristina, ya que según ha subrayado actualmente «existe una gran desinstitucionalización del matrimonio».
La cita anual del catolicismo español, organizada por la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y la Fundación Universitaria San Pablo CEU, ha finalizado con la lectura de un manifiesto.
En el texto, los organizadores del Congreso afirman que «la familia es la unión y comunión de dos personas, hombre y mujer, comprometidos en el proyecto de formar un hogar donde brote el don de la vida a través de los hijos».
Asimismo, reconocen a la familia como «la principal escuela de humanidad donde los padres son los primeros responsables de la educación de sus hijos, transmisores de principios, valores y virtudes». Por este motivo, indican, «se ha de facilitar este derecho-deber educativo de los padres, para que estos puedan elegir los centros docentes cuyo ideario garantice también la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones».
También denuncian «la intromisión del Estado en la educación afectivo-sexual de los niños y jóvenes, mediante la infiltración en los ámbitos educativos de la «ideología del género», que pretende diseñar la sexualidad y su ejercicio al margen de los referentes de la antropología adecuada e integral»; y «la falta de políticas familiares justas y adecuadas en nuestra sociedad, donde prima una concepción materialista que excluye de la vida social la búsqueda de los valores y dimensiones de trascendencia propias del ser humano».
Por todo lo expuesto anteriormente, los promotores de la reunión consideran que «es evidente que la familia necesita una atención prioritaria por parte de los gobiernos, las administraciones e instituciones públicas en el marco de su defensa y necesidades como son: la conciliación trabajo-familia, la protección de la vida y la educación».
Ante los graves problemas a los que se enfrentan hoy en día las familias, destacan, «queremos manifestar nuestra admiración por la fidelidad generosa de tantos matrimonios que viven estas pruebas con fortaleza, entrega, fe y amor. Así como por el testimonio de unión y ayuda mutua que demuestran cada día, abuelos, hermanos, tíos y primos, toda la familia». «Queremos también expresar nuestra cercanía y comprensión a las familias desunidas y rotas, cuyos miembros sufren con frecuencia la falta de confianza y apoyo», concluyen.
En su decimosexta edición, el Congreso Católicos y Vida Pública ha abordado el tema «La familia siempre: desafíos y esperanza», y ha tenido lugar los días 14, 15 y 16 de noviembre en el Campus de Montepríncipe de la Universidad CEU San Pablo de Madrid.
Para más información: www.congreso.ceu.es