La remodelación del área de la Gruta del Santuario de Lourdes, lugar donde la Santísima Virgen se apareció a santa Bernadette Soubirous en 1858, avanza a pasos agigantados. Esta iniciativa recibe el nombre de «Projet Grotte – Cœur de Lourdes» (Proyecto Gruta – Corazón de Lourdes) y contempla cambios en la zona que rodea el lugar de las apariciones para fomentar el ambiente de oración y una mayor organización en el área, como parte del trabajo pastoral trazado por el obispo de Tarbes y Lourdes, Mons. Nicolás Brouwet, en febrero de 2014.
Las obras, que comenzaron el pasado 17 de noviembre y que se extenderán en dos etapas hasta 2016, van más allá de las reparaciones que fueron necesarias tras la inundación registrada en la Gruta en 2012. «Nuestra misión es asegurarnos de que todos los que vienen al Santuario sean tocados, ante la Gruta, por el amor incondicional de Jesús», expuso Mons. Brouwet en sus Orientaciones para el Santuario. «Nuestra predicación, nuestros proyectos, nuestras iniciativas y nuestro trabajo deben conducir a eso», añadió. La propuesta de reforma, que fue aceptada de manera unánime por los obispos franceses, busca un retorno al ambiente original de oración y meditación, con menos actividad no relacionada directamente a la contemplación y un camino ordenado para los peregrinos.
El 11 de febrero de 1858, Bernadette recogía leña en Massabielle, en las afueras de Lourdes, cuando acercándose a una gruta, una ráfaga de viento la sorprendió y vio una nube dorada y a una Señora vestida de blanco, con sus pies descalzos cubiertos por dos rosas doradas, que parecían apoyarse sobre las ramas de un rosal, en su cintura tenia una ancha cinta azul, sus manos juntas estaban en posición de oración y llevaba un rosario.
La niña al principio se asustó, pero luego comenzó a rezar el rosario que siempre llevaba consigo, al mismo tiempo que la pequeña, la Señora pasaba las cuentas del suyo entre sus dedos, al finalizar, la Virgen María retrocedió hacia la Gruta y desapareció. Estas apariciones se repitieron 18 veces, hasta el día 16 de julio.
El Santuario de Lourdes es actualmente el primer destino de peregrinación mariana del mundo. No en vano, son más de 6 millones de peregrinos los que vienen cada año. De ellos, más de cien mil son enfermos que acuden en busca de alivio y consuelo.