El papa Francisco recibió este jueves en el Vaticano a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, comenzando el encuentro con un ¡Encantado de que usted esté aquí! A continuación fueron a la biblioteca en donde privadamente conversaron durante 47 minutos, claramente sin necesidad de intérprete. La presidenta de origen evangélico que se declara agnóstica, estaba con un elegante vestido negro de manga media, tipo tailleur.
Entre los temas espinosos que se supone hayan conversado, aunque no ha sido confirmado, está el proceso iniciado en Chile para despenalizar el aborto con tres causales (riesgo de vida de la madre, violación e inviabilidad fetal), lo que ya ha sido planteado por los obispos del país andino. La Santa Sede en un comunicado indicó solamente que se conversó «sobre la defensa de la vida humana».
Finalizado el encentro privado, entró la delegación compuesta por 17 personas, quienes saludaron al Papa uno a uno, entre ellos el canciller Heraldo Muñoz Valenzuela. la hija de Salvador Allende, la senadora Isabel y la embajadora Mónica Jiménez.
Acabados los saludos, la presidenta le regaló un rosario de lapislázuli y plata, realizado con esta piedra semipreciosa, de la cual Chile tiene unas de las mayores minas del mundo. También le regaló un libro titulado ‘Las iglesias del fin del mundo’, sobre la realidad eclesial en su país. Le siguió la foto oficial de recuerdo de la delegación con el Santo Padre.
Por su parte, el papa Francisco le regaló un medallón de unos 20 centímetros de diámetro con una imagen de San Martín de Tours a caballo, con armadura romana, que corta su manto y comparte la mitad con un indigente. Asimismo le entregó una edición encuadernada en blanco con el texto de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium.
Concluida la audiencia, la presidenta se reunió con el Secretario de Estado, cardenal Pietro Parolín, y el ‘ministro de exteriores del Vaticano’ el secretario para las relaciones internacionales, el arzobispo Gallagher. La presidenta salió del Palacio Apostólico acompañada por un cortejo de los gentilhombres del Vaticano.
Al finalizar la visita, la senadora Isabel Allende consideró que la duración de la misma demuestra que han hablado de los temas en agenda con profundidad y además en un mismo idioma. El jefe de la Cámara de diputados, Marco Antonio Núñez, resaltó el hecho de que Bergoglio antes de ser Papa, haya vivido y conocido Chile de cerca.
Por su parte, la Oficina de Prensa de la Santa Sede indicó en un comunicado que «durante los cordiales coloquios se indicaron las buenas relaciones bilaterales existentes entre Chile y la Santa Sede» y desearon que «puedan ulteriormente reforzarse de acuerdo con los instrumentos jurídicos previstos por el Derecho Internacional». El comunicado prosigue: «Sucesivamente se afrontaron temas de común interés, como la defensa de la vida humana, la educación y la paz social. En tal contexto se reafirmó el rol y la contribución positiva de las instituciones católicas en la sociedad chilena, especialmente en la promoción humana y en la formación y asistencial de los más necesitados». La nota de prensa de la Santa Sede concluye recordando que «durante el encuentro no ha faltado una panorámica sobre la situación de América Latina, en particular sobre algunos desafíos que tiene el continente».