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Jun 15, 2015 13:55
Día
El Consejo Nacional de Juventud de la Conferencia Episcopal Española (CEE) se reunió del 12 al 14 de junio en la Casa Diocesana de Málaga. Este grupo de trabajo integrado por jóvenes representantes de las distintas provincias eclesiásticas o de diversas zonas del país, se reune tres veces al año en diferentes localidades, y en esta ocasión eligieron la ciudad de Málaga.
El consejo comenzó su actividad el viernes por la tarde, con la acogida de los participantes, la celebración de la Eucaristía y el rezo de vísperas presidido por Mons. Carlos Escribano, obispo de Teruel y uno de los obispos responsables del Departamento de Juventud de la CEE.
El sábado fue un día de trabajo intenso, con diferentes comunicaciones y grupos de trabajo en torno a temas como el primer anuncio o el acompañamiento espiritual. En palabras de Mons. Escribano, “hay muchos temas importantes que hablar en Juventud, pero estos dos temas son de los más necesarios y en los que es fundamental profundizar: el primer anuncio y el acompañamiento”. “También era necesario hablar del Encuentro Europeo de Jóvenes que tendrá lugar en Ávila el próximo verano, y en el que ya tienen previsto participar 300 malagueños. Sois una de las diócesis de la que participarán más jóvenes”, añadió.
Por la tarde-noche, los asistentes disfrutaron de un paseo por la ciudad, de la visita a la exposición Huellas en Ars Málaga-Palacio Episcopal y de la visita a las cubiertas de la catedral.
El domingo la jornada comenzó a las 8:30 horas, con la celebración de la Eucaristía y el rezo de las Laudes. Después continuaron el trabajo y presentaron el plan de trabajo para 2015-2022, informó la página web de la diócesis de Málaga.
“Un fin de semana intenso de trabajo y convivencia para potenciar y mejorar el trabajo en la Pastoral Juvenil y con el deseo de acercar a los jóvenes, cada vez más, a la persona de Jesucristo”, señalaron los responsables de Juventud.
Es la primera vez que el Consejo Nacional celebra su reunión en Málaga, “pero no será la última”, aseguró Gonzalo Otalecu, miembro de Pastoral de Juventud de la diócesis de Málaga. De hecho, los participantes destacaron “la buena acogida que hemos recibido. Además de trabajar, hemos conocido mejor la diócesis que nos ha acogido”.
Por su parte, el obispo de Teruel destacó que “el trabajo con jóvenes está lleno de ilusión y es complicado, pero es muy gratificante la respuesta que recibimos de los jóvenes”. Más de una veintena de responsables de Juventud de toda España trabajaron de forma conjunta temas de interés para todos, “lo más importante es la reflexión que hacemos para seguir animando en la Pastoral Juvenil”, concluyó Mons. Escribano.
