(ZENIT – Roma).- Al menos 25 cristianos murieron y más de 50 resultaron heridos, mayoritariamente mujeres y niños, en un atentado terrorista en Egipto perpetrado este domingo en una capilla de la Catedral ortodoxa copta de San Marcos, sede del patriarcado, al oeste de El Cairo.
El atentado no fue reivindicado por ninguna sigla terrorista, si bien se presume haya sido realizado por radicales de inspiración islamista, quienes han provocado centenares de muertos desde el golpe de Estado de 2013 y que acusan a los cristianos de apoyar al militar Abdel Fatah al-Sisi, actualmente en el poder.
El mandatario calificó el atentado de “acto odioso” y añadió que “esto sólo reforzará la determinación y la cohesión del pueblo egipcio para hacer frente a estas circunstancias”. Además Al-Sisi declaró tres días de luto oficial.
La condena de la Iglesia ortodoxa copta no se hizo esperar, ni tampoco la realizada por la Universidad de Al Azhar, principal institución musulmana de Egipto.
Los cristianos habitualmente perseguidos en el país fueron señalados como anti-islámicos por los seguidores del derrocado gobierno de Morsi, los cuales fueron desalojados en agosto de 2013 de la plaza de Rabá al Audawia, en donde realizaban una protesta. En el desalojo realizado por el ejército murieron más de 600 personas. A continuación unos 40 templos cristianos fueron destruidos o incendiados.
El papa Francisco comentando el asesinato de ls 21 cristianos coptos, degollados por los terroristas del Califato Islámico, señaló la importancia del ‘ecumenismo de la sangre’, y subrayó que murieron –como se veía en el vídeo– pronunciando el nombre de Jesús.
Icono de los 21 cristianos coptos asesinados por terroristas del califato islámico
Egipto: Al menos 25 fallecidos en un atentado en la misa de los cristianos coptos
El gobierno, el patriarcado ortodoxo y la Universidad de Al Azhar condenaron la acción terrorista