(ZENIT, 8 Sept. 2017).- Concluida la ceremonia de reconciliación de este viernes por la tarde en el parque Las Malocas, en Villavicencio, el santo padre Francisco fue en el papamóvil hasta el Parque de los Fundadores de Villavicencio.
Allí el vehículo se detuvo y el Pontífice con un ramo de flores blancas se dirigió hacia la Cruz de la Reconciliación, blanca de unos diez metros de altura.

Plantando el árbol
Mientras el Santo Padre depositaba las flores a los pies de la cruz y rezaba interiormente, se escuchaba una trompeta que interpretaba el toque de silencio.
A continuación fue plantado un árbol como símbolo de la vida que se renueva, por tres niños y el Pontífice.
Desde aquí el Papa se dirigió al aeropuerto Apiay de Villavicencio, en donde a bordo de un A321 de la empresa Avianca, partió hacia Bogotá.
En el exterior de la Nunciatura le recibirán las víctimas de la violencia, militares, agentes y ex guerrilleros.