(ZENIT – 24 sept. 2018).- Los jesuitas de Lituania se reunieron alrededor del Papa Francisco en la Nunciatura de Vilna, en la tarde del domingo 23 de septiembre de 2018, el segundo día del viaje del Papa a Lituania: este lunes en Riga (Letonia) y el martes en Tallin (Estonia).
El padre Antonio Spadaro SJ, director de la «Civiltà Cattolica», que acompaña al Papa Francisco en sus viajes publicó dos fotos del encuentro en su cuenta de Twitter.
Él agrega este comentario: «El Papa Francisco con los jesuitas de Lituania, Letonia y Estonia, incluidos tres obispos jesuitas. Maravilloso encuentro. Gozoso al principio pero también muy profundo y lleno de sabiduría».
Entre los jesuitas presentes, tres obispos de los cuales: el Arzobispo Emérito de Telšiai (2002-2017), Mons. Jonas Boruta, 73, el nuevo arzobispo de Kaunas, Mons. Liongina Virbalas, 57, y el ex arzobispo (1996-2015), Mons. Sigitas Tamkevicius, de 79 años, que el Papa citó durante el encuentro con el clero y los consagrados en Kaunas, y que le estuvo acompañando en su visita al Museo de Ocupaciones de Vilna en los lugares en donde logró no traicionar, a pesar del abuso de la KGB. Y fue sentenciado a 10 años de deportación al gulag de Siberia y de trabajos forzados.
Es redactor de la «Crónica de la Iglesia Católica en Lituania», escribe clandestinamente en 1972, cuando era vicario de Simnas (Sudoeste). También fundó, con otros sacerdotes, el Comité Católico para la Defensa de los Derechos de los creyentes en 1978. Pero terminó siendo detenido, al igual que otros colaboradores de la Crónica en 1983 tras la muerte de Leonidas Brezhnev (1982). Él será liberado después de los campos de trabajo forzado, por la Perestroika, en 1988.
Él confió a Zenit hace unos años que el gulag era el período «más hermoso» de su vida, debido a la presencia de Cristo que le sostenía. Celebraba clandestinamente la Misa con migas de pan y el jugo de las pasas que lograron pasarle.
© Traducción ZENIT, Raquel Anillo