(ZENIT – 17 abril 2019).- En la audiencia general de hoy 17 de abril de 2019, el Papa Francisco, después del saludo a los peregrinos francófonos presentes, trasladó a la comunidad diocesana de París, a todos los parisinos y a todos los franceses su dolor, afecto y cercanía tras el incendio en la catedral de Notre-Dame el pasado lunes 15 de abril.
“Estoy muy entristecido –dijo- y me siento muy cerca de todos vosotros. La gratitud de toda la Iglesia va a aquellos que han trabajado duro, incluso arriesgándose, para salvar la basílica. ¡Que la Santísima Virgen María os bendiga y apoye la obra de reconstrucción: que sea una obra coral, para la alabanza y la gloria de Dios! ¡Dios os bendiga!», dijo el Papa.
En los últimos días, el Papa Francisco ha mostrado de diversas maneras su proximidad con la catástrofe acaecida en Notre-Dame. Por un lado, Alessandro Gisotti, Director ad interim de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, realizó dos declaraciones difundidas el 15 de abril y el 16 de abril.
El Papa, por su parte, ayer por la mañana hizo llegar un mensaje al arzobispo de París, Monseñor Michel Aupetit. Por la tarde, el Santo Padre realizó una llamada telefónica al Presidente de Francia, Emmanuel Macron, transmitiéndole su solidaridad con la población francesa tras el incendio. Asimismo, también en el día de ayer, en todas las cuentas oficiales de Twitter, el Pontífice publicó unas palabras de apoyo y aliento en torno a este suceso.
Una vez evaluados los daños, hoy, 17 de abril, el presidente de la República francesa, Macron, ha convocado un consejo de ministros especial y una reunión con los actores llamados a colaborar en la reconstrucción de la catedral parisina con el fin de comenzar a fijar el método de trabajo a seguir.