(ZENIT – 5 agosto 2019).- Aprender a dialogar y a tomar decisiones juntos como vía para la paz es el hilo conductor del Manifiesto que el Parlamento Universal de la Juventud (PUJ) presentó el pasado 3 de agosto en la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) y que recoge el trabajo de tres mil jóvenes parlamentarios de 31 países.
El PUJ es un foro ecuménico ideado por Fernando Rielo en 1981 y que en esta edición ha debatido sobre “Paz en construcción: tomando decisiones juntos para una nueva civilización”.
Esta ha sido la quinta sesión plenaria internacional a la que han asistido 120 jóvenes de América, África, Asia y Europa, e incluso de las nacionalidades indígenas ecuatorianas otavalo y shuar. Es promovido por la organización internacional Juventud Idente con el apoyo de la UPSA y de la Fundación Fernando Rielo.
Bases para construir la paz
La comunión frente al individualismo, la diversidad frente a la uniformidad, la crisis como oportunidad y la apertura a la transcendencia son algunas de las bases para construir una paz duradera a través de la toma de decisiones en cualquier ámbito vital.
Comparando la paz con un edificio en construcción continua, los jóvenes afirman que los pilares del mismo, entre otros, son la prioridad de los procesos sobre lo inmediato, la riqueza de lo diferente, el bien común y la ayuda mutua. Todo ello como condición para que las decisiones conjuntas provengan de relaciones y diálogos en y desde la paz.
Intervenciones
El Presidente de la Fundación Fernando Rielo y de los Misioneros/as Identes, el padre Jesús Fernández, ha enviado un mensaje a los jóvenes subrayando que el progreso científico y técnico no ofrece en sí mismo la paz, aunque esta no es posible sin él, pero requiere la preocupación por el otro y por el cuidado del planeta. Es preciso construir vínculos humanos auténticos y, citando a Fernando Rielo, saber que el amor es el motor de la historia, de la ciencia, la familia y la paz.
Asimismo, intervino en la sesión Marta Simoncelli, coordinadora para la península ibérica de Scholas Occurentes, que manifestó que foros como este son la expresión máxima de una educación que incluye a la familia y a toda la sociedad, sin lo cual no es posible la paz. Asimismo, elogió que el Manifiesto del PUJ proponga construir puentes y la cultura del encuentro.
El obispo de la Diócesis de Salamanca, Mons. Carlos López Hernández, destacó, por su parte, la profundidad del Manifiesto del PUJ, pues va más allá de lo sociológico y de lo político, reflejando el humanismo de la bienaventuranzas y recordando que el humanismo de Cristo es válido para todos los seres humanos.
Por otra parte, el prelado animó a los jóvenes a no olvidar que solo desde la paz interior, don pascual y fruto de la reconciliación que nos trae Cristo, es posible transmitir y construir la paz.
Tras la solemne firma del Manifiesto por parte de todos los jóvenes, se anunció que la sede de la edición del 2021 será en Quito, Ecuador, con el tema marco de la libertad de pensamiento, de expresión y las redes de comunicación.
