(zenit – 19 marzo 2020). Hoy es un gran día para todos los católicos y familias del mundo: Se celebra la solemnidad de san José, esposo de la santa Virgen María y patrono de la Iglesia Universal. Este año, la fiesta cobra un sentido muy especial, en medio de la difícil situación, se nos brinda la oportunidad de invocar al protector de las familias y mostrar nuestra cercanía de una forma más creativa a los papás en el día de su patrono.
“Confía tu existencia a este gran santo”: el Papa Francisco exhortó ayer, en la audiencia general, en estos días difíciles para la humanidad, invocar a san José en el día de su onomástica. “Pidámosle que proteja a nuestras familias. De manera especial, para proteger a los enfermos y a las personas que están a su cuidado: médicos, enfermeras y voluntarios, que arriesgan sus vidas en este servicio”.
La devoción a san José se fundamenta en que este hombre “justo” fue escogido por Dios para ser el esposo de María Santísima y hacer las veces de padre de Jesús en la tierra. Esposo virginal de la Virgen María, custodio de la Sagrada Familia, padre y guardián de la Iglesia, abogado de la buena muerte. Proclamado por Pío IX patrono de la Iglesia universal.
7 años que comenzó el papado de Francisco
Este 19 de marzo de 2020 es un día especialmente significativo para el Santo Padre por dos motivos: la celebración de la fiesta de san José, a quien tiene una gran devoción coincide con el 7º aniversario del comienzo de su pontificado, siete días después de ser elegido papa el 13 de marzo de 2013.
Francisco recordó ayer que san José, “en la vida, en el trabajo, en la familia, en la alegría y en el dolor siempre buscó y amó al Señor, mereciendo en las Escrituras el reconocimiento de un hombre justo y sabio”, y animó a los fieles a invocarlo “siempre, sobre todo en los momentos difíciles”.
Un hombre fuerte y de silencio
“Yo quiero mucho a san José”, dijo el Santo Padre el 16 de enero de 2015 durante su viaje apostólico a Filipinas, mientras celebraba un encuentro con las familias en Manila. “Porque es un hombre fuerte y de silencio. Y tengo en mi escritorio tengo una imagen de san José durmiendo. Y durmiendo cuida a la Iglesia. Sí, puede hacerlo. Nosotros no. Y cuando tengo un problema, una dificultad, yo escribo un papelito y lo pongo debajo de san José para que lo sueñe. Esto significa para que rece por ese problema”.
Son muchas las ocasiones en las que Francisco ha hecho pública su gran devoción al santo esposo de María. por ejemplo, el 18 de diciembre de 2018, en su homilía de la Misa matutina celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta.
Onomástica del Papa emérito
Joseph Aloisius Ratzinger –nombre del Papa emérito Benedicto XVI– celebra hoy su onomástica a sus 92 años. Igualmente, el papa alemán se refirió a su patrón en numerosas ocasiones y dedicó una fuente en los jardines vaticanos al padre adoptivo de Jesús, que bendijo el 5 de julio de 2010, un regalo de la Gobernación del Estado del Vaticano, dirigida por Carlo María Viganò.
En esta ocasión, Benedicto XVI recordó que san José fue sometido a una dura prueba de fe: “Prometido de María, antes de ir a vivir con ella, descubre su misteriosa maternidad y queda turbado. El evangelista Mateo subraya que, como era justo, no quería repudiarla y, por tanto, resolvió despedirla en secreto (cf Mt 1,19). Pero en sueños el ángel le hizo comprender que lo que sucedía en María era obra del Espíritu Santo; y José, fiándose de Dios, accede y coopera en el plan de la salvación. Ciertamente, la intervención divina en su vida no podía no turbar su corazón”.