(zenit – 29 marzo 2020).- “Pido a las autoridades que sean sensibles a este grave problema y tomen las medidas necesarias para evitar futuras tragedias”, dijo el Papa, lamentando las condiciones de vida en las prisiones superpobladas, en este momento de pandemia.
El Papa lanzó este llamado después del Ángelus, este domingo 29 de marzo de 2020, desde la biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano.
También habló de las dificultades de confinamiento para diferentes categorías: “Por el momento, mis pensamientos se dirigen de manera particular a todos aquellos que sufren la vulnerabilidad de verse obligados a vivir en grupos: casas de retiro, cuarteles … Quisiera mencionar especialmente a las personas que están en prisión”.
El Papa evoca la señal de alarma lanzada por la Comisión de Derechos Humanos: “He leído un memorando oficial de la Comisión de Derechos Humanos que habla del problema de las prisiones superpobladas, que podrían convertirse en un tragedia. Pido a las autoridades que sean sensibles a este grave problema y que tomen las medidas necesarias para evitar futuras tragedias”.
El Papa concluyó con sus deseos: “Les deseo a todos un buen domingo. No se olviden de rezar por mí; yo lo hago por ustedes. Buen almuerzo y adiós”.
Posteriormente, al Ángelus había pedido previamente la paz mundial.
Luego, el Papa se dirigió a su despacho, cuya ventana da a la plaza san Pedro, que se encontraba desierto, aparte del policía italiano que hace su ronda allí, para bendecir la ciudad.