(zenit – 31 julio 2020).- El pasado 29 de julio fue rechazado el proyecto de despenalización del aborto en Veracruz por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde se votó en contra de la iniciativa que se buscaba reformar el código penal local.
Los obispos del Consejo Episcopal Mexicano manifestaron su alegría en un comunicado difundido el mismo día, a través de su Dimensión Episcopal de Vida, con el que celebraron el hecho de que se haya preservado la protección de la vida humana en gestación.
En un fallo mayoritario, los ministros de la primera sala desecharon el proyecto presentado por cuatro votos contra uno y, con ello, no se vio afectada la normatividad del estado de Veracruz sobre el aborto, ni tampoco se sentó un precedente que hubiera podido conducir a afectar en otras entidades, señalaron los prelados.
Para los obispos y fieles de la Iglesia Católica en México, unidos a muchos otros, la despenalización aborto supone una ocasión para “agradecer a Dios que se haya preservado la protección jurídica de la vida humana en gestación”.
El bien es la vida, no la muerte
“Si bien, nos produce un alivio el que esta coyuntura haya concluido de esta forma, reiteramos que el bien auténtico de la mujer, antes y después de nacer, es la vida y no la muerte”, se puede leer en la nota firmada por monseñor Jesús José Herrera Quiñones, responsable de la Dimensión Episcopal de Vida de la CEM, así como por Mons. Rogelio Cabrera y Mons. Alfonso Miranda, presidente y secretario general del órgano episcopal, respectivamente.
“En este momento de la historia de nuestro país, ante los graves desafíos que vivimos”, denunciaron, “es necesario renovar el aprecio incondicional de la vida humana, y recuperar la confianza en que la solidaridad puede salir al encuentro de cualquier carencia, de modo que la ‘cultura de la vida’ pueda permear en todo nuestro país”.
De esto modo, recordaron que “es preciso anunciar y actuar para dar presencia y peso a una agenda social que busque la dignidad de la persona, el bien de la familia y el desarrollo de la sociedad, en un entorno de libertad y corresponsabilidad (DC 10)”.
