(zenit – 28 sept. 2020).- La Conferencia Episcopal de Nicaragua, informó que a partir del domingo 4 de octubre se realizará la reapertura de los templos y la celebración de los sacramentos a decisión de cada obispo, cumpliendo con todas las medidas dictadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Hemos tomado la decisión de que cada obispo, si lo considera conveniente, dé normas propias para la reapertura de los templos y celebración de los sacramentos a partir del domingo 4 de octubre de 2020, cumpliendo las medidas de bioseguridad”, indica el mensaje de la Conferencia Episcopal publicado en la tarde del 26 de septiembre.
Llamado a retomar la vida de fe
La jerarquía católica convocó a los feligreses a retomar la “vida de fe” de manera gradual en cada rincón del país. “Hemos asumido el reto con temor y temblor, conscientes no solo del peligro de la pandemia sino también, de la crisis sociopolítica que vive nuestro país: de convocar a todos los católicos que con caridad y responsabilidad fraterna retomemos nuestra vida de fe comunitaria, de manera gradual”.
La decisión llega después de seis meses de mantener suspendidas las actividades religiosas por la pandemia del coronavirus. Sin embargo, el Gobierno de Daniel Ortega intentó a toda costa que se realizarán procesiones y actividades en diversos puntos del país, acción que no tuvo éxito en el territorio nacional.
El documento también expone que el episcopado ha “monitoreado el comportamiento de la pandemia, escuchando las voces de profesionales de la salud, tanto nacionales independientes, como expertos internacionales, y coinciden en que los niveles de contagio han disminuido gradualmente”.
Sin datos oficiales creíbles realizan monitoreo independiente
En Nicaragua las autoridades del Gobierno han manejado los datos estadísticos de casos y victimas de la pandemia con mucho hermetismo, lo que ha sido cuestionado por la sociedad.
Por su parte, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 informó que la cantidad de fallecidos por síntomas relacionados a la pandemia en Nicaragua, incluyendo neumonía, se elevó a 2.735, luego de registrar 14 muertes entre los pasados días 17 y 23 de septiembre.
El Observatorio, una red de médicos y voluntarios que da seguimiento a la pandemia en Nicaragua, también reportó que el total de casos sospechosos de COVID-19 se elevó a 10.396, desde el primer caso reportado por las autoridades, en marzo pasado, tras detectar 138 nuevos pacientes.
Los datos del conglomerado mantuvieron el contraste con los del Gobierno de Nicaragua, que, hasta el pasado martes, fecha de su último reporte, reconoció 149 muertos y 5.075 casos confirmados.
Contrario al Ministerio de Salud, que señala casos confirmados, el Observatorio hace referencia a “sospechosos”, ya que en Nicaragua el acceso a las pruebas de coronavirus es restringido.
Irregularidades
El Observatorio señaló que ha detectado “2.473 irregularidades” que agudizan los efectos de la pandemia, principalmente la “exposición de personas en actividades que conllevan aglomeraciones”, mismas que son promovidas por el Gobierno, con el objetivo de mantener activa la economía, según han divulgado las autoridades.
El Gobierno del presidente Daniel Ortega ha sido criticado desde diversos sectores por promover actividades masivas, por no haber suspendido las clases presenciales en medio de la pandemia, y por apenas establecer restricciones. El manejo de la pandemia ha despertado preocupación en los organismos regionales y mundiales dedicados a la salud y los Derechos Humanos.