(zenit – 29 sept. 2020).- Hoy, en el Vaticano, comienza la visita del Comité de expertos del Consejo de Europa para la evaluación de las medidas contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo en el marco de la quinta ronda de evaluación (Fifth Evaluation Round), informa la Oficina de Prensa de la Santa Sede a través de un comunicado.
Esta evaluación, a la que se someten progresivamente todas las jurisdicciones que se adhieren al Grupo Moneyval, fue acordada en 2019.
Fase de evaluación
La nota describe que esta fase de evaluación “se centra principalmente en la eficacia de los instrumentos legislativos y organizativos adoptados en los últimos años por las jurisdicciones para prevenir el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo”.
La valoración actual de la Santa Sede forma parte de la evolución natural de un proceso que comenzó con la primera visita in situ en 2012 y la posterior aprobación del Informe de Evaluación Mutua de 4 de julio de 2012 y continuó con el Primer Informe de Progreso de 9 de diciembre de 2013, el Segundo Informe de Progreso de 8 de diciembre de 2015 y el Tercer Informe de Progreso de 6 de diciembre de 2017.
Discurso del cardenal Parolin
En el discurso pronunciado con ocasión de la visita de Moneyval, el cardenal Secretario de Estado Pietro Parolin destacó el compromiso de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano en el frente de la transparencia, la corrección y la cooperación internacional en el ámbito económico-financiero, así como con la elección “de formar parte del sistema de evaluación de las normas contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo, promovido por el Programa Moneyval del Consejo de Europa”.
El cardenal declaró que “se está llevando a cabo una aplicación progresiva de sistemas que permiten un mayor control de las corrientes financieras que podrían exponer a riesgos de blanqueo de dinero y financiación del terrorismo y, en este sentido, las intervenciones y recomendaciones de los evaluadores de Moneyval son un recurso que atesoramos”.
A diferencia de otros sujetos que se adhieren al proyecto Moneyval, “cuyas economías están destinadas a crear riqueza y bienestar para sus respectivas comunidades nacionales”, el purpurado apuntó que los fondos gestionados por la Santa Sede y el Estado de la Ciudad del Vaticano “están destinados principalmente a obras de religión o de caridad”.
Dimensión ética de las inversiones
Precisamente por el destino prioritario de los fondos “es necesario que se preste especial atención a la dimensión ética de las inversiones”, añadió.
“Agradecemos su presencia y los estímulos que nos dais para prestar un servicio que nos permita pensar en una financiación cada vez más al servicio del hombre”, dijo finalmente el secretario de Estado Vaticano.