(zenit – 24 dic. 2020).- El pasado martes 22 de diciembre de 2020, el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, transmitió al Hospital Pediátrico Bambino Gesù de Roma los habituales saludos y abrazos de Navidad del Papa Francisco.
Según ha informado L’Osservatore Romano, el purpurado fue a la sede hospitalaria en la colina de Janículo para conectarse online con el personal sanitario del centro infantil, y mantuvo, antes de los saludos, una reunión con el grupo de médicos especialmente expuestos a la lucha frente a la COVID-19.
Agradecimiento
Parolin confesó en su mensaje que en su estudio guarda un dibujo recibido de un niño ingresado en el Bambino Gesù en el que el pequeño escribió: “Nuestra oración es más fuerte que el virus”. Es precisamente esta mentalidad de los jóvenes enfermos la que hizo que el cardenal agradeciera al personal su trabajo “generoso, concienzudo, competente, discreto y a menudo oculto”.
Del mismo modo, tal y como informa Vatican News, destacó su “respuesta rápida y eficaz” durante la pandemia, trabajo hecho posible por la “excelencia que vive cada día el hospital”, centro que dispone de recursos “humanos y espirituales” para hacer frente al “mal que representa la COVID y todas las demás enfermedades que afligen a los niños”.
En primera línea
Previamente a los saludos virtuales, el secretario conversó con la presidenta del hospital, Mariella Enoc, y el grupo de doctores más expuestos en la lucha contra el coronavirus. Les comunicó que “ante la situación incierta y sin precedentes” habían ofrecido “una respuesta eficaz gracias a su capacidad de trabajar juntos, combinando diferentes recursos y conocimientos técnicos”.
Por último, les felicitó por el resultado conseguido, y dio gracias a la presidenta por su labor de “animación y coordinación”: el Bambino Gesù “ha sabido dar lo mejor de sí mismo en esta situación porque está acostumbrado a hacerlo en cada momento del año”. Del “compromiso diario”, concluye, “viene la capacidad de dar respuestas incluso en emergencias”.