Redacción
(Zenit 03.05.2021) El viernes 30 de abril el actual ocupante del Palacio de Miraflores recibió en esa sede del poder ejecutivo al nuncio apostólico del Papa en Venezuela, Mons. Aldo Giordano, y al cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Mérida y administrador apostólico de la arquidiócesis de Caracas.
El encuentro se tuvo en ocasión de la beatificación del médico venezolano José Gregorio Hernández, evento al que acudieron varios miembros del gobierno de Nicolás Maduro, incluyendo a su esposa.
“Puedo decir que esta reunión que hemos tenido hoy es una reunión de reconciliación, es una reunión de perdón”, declaró el señor Maduro tras el encuentro, si bien no se ofrecieron detalles sobre los temas tratados con los dos eclesiásticos.
En un tono que contrasta con el que habitualmente ha usado Nicolás Maduro para referirse a los obispos venezolanos, con quienes la relación ha sido tensa y a quienes en el pasado acusó de hacer política desde las iglesias, el parcialmente reconocido presidente de Venezuela expresó también su gratitud: “Le agradezco al cardenal Baltazar Porras, a la Iglesia católica y al nuncio apostólico, pero sobre todo al papa Francisco, por haberle dado este justo reconocimiento y haberle dado este regalo de fe y de espiritualidad a nuestro pueblo”.
