(ZENIT Noticias / Roma, 25.04.2022).- El representante de la Isla de Elba, en representación de las 87 pequeñas islas italianas, y la «Squadra del Papa – Fratelli tutti» jugarán juntos, en fraternidad, un más que amistoso partido de fútbol el martes 26 de abril, a las 18.30 horas, en el “Estadio Trastevere” (via Vitellia, 50 – Roma), para sensibilizar sobre los problemas sociales vinculados a la despoblación de las islas y relanzar proyectos para los jóvenes.
El Papa Francisco recibirá en audiencia a los dos equipos la mañana siguiente, miércoles 27 de abril. La organización del partido es posible gracias a la Liga Nacional Amateur, la Lega Pro y el Trastevere Calcio. El director será el árbitro Paolo Valeri.
El equipo de la Isla de Elba que representa a las pequeñas islas italianas
Los deportistas de la Isla de Elba escribieron al Papa para contarle la realidad social que viven a diario los 240.000 habitantes de las pequeñas islas de Italia, pidiéndole la posibilidad de un encuentro personal para animarse a «invertir» en la presente y el futuro de estas «rocas» y garantizar que el fenómeno de la despoblación -especialmente de los jóvenes- no ponga en entredicho los servicios esenciales de salud y educación.
Y también pidiéndole que juegue un partido de fútbol en fraternidad con la «Squadra del Papa – Fratelli tutti», formada por ciudadanos y empleados del Vaticano a los que se suma significativamente un joven con síndrome de Down que vive la experiencia de Special Olympics, dos africanos inmigrantes que llegaron a Italia a través de los corredores humanitarios y fueron acogidos por la Comunidad de Sant’Egidio y algunos jóvenes ucranianos. El equipo depende del Consejo Pontificio para la Cultura.
Así, el martes 26 de abril se jugará el partido fraternal y el miércoles 27 el Papa Francisco recibirá personalmente a los representantes de las islas en la audiencia general. “Queremos representar a través del deporte, vehículo social de gran impacto, las penurias que viven cada día las poblaciones que han optado por vivir en islas pequeñas, pero también las alegrías y esa sensación de estar en un paraíso terrenal”, dice Gaetano D’Auria, presidente de la Asociación de Fútbol de la Isla de Elba que representará a los equipos de las pequeñas islas italianas.
“Llevaremos a nuestro pueblo el calor que el Santo Padre nos transmitirá”, dice D’Auria. “Le hablaremos de los problemas de los inviernos tormentosos, cuando los fuertes vientos impiden las conexiones. Pero también la sensación de sentirse aislado, olvidado por las autoridades centrales. Le diremos que la Iglesia está siempre presente y cercana a las personas y sobre todo le pediremos una palabra de aliento para nuestros jóvenes, para que no abandonen el lugar donde nacieron. Y quizás un partido de fútbol jugado en amistad, sin mirar el resultado, puede ser… milagroso”.
El equipo del Papa
El “Equipo del Papa – Fratelli tutti” es formado por Odoacer Chierico, con la coordinación de Danilo Zennaro, funcionario del Dicasterio Vaticano para los Laicos, la Familia y la Vida. En el Vaticano, el deporte está encomendado al Consejo Pontificio para la Cultura y al club deportivo oficial Athletica Vaticana. Como no existe un verdadero equipo de fútbol, el 21 de noviembre se formó el «Equipo del Papa – Fratelli tutti» para el partido por iniciativa del Papa Francisco, con la Organización Rom Mundial.
Al recibir a los dos equipos en audiencia el 20 de noviembre, en la víspera del partido, el Papa quiso explicar personalmente el significado y la composición de «su» equipo:
«El equipo con el que -y no “Contra” que -jugarás mañana- representa un estilo de pasión deportiva vivida con solidaridad y gratuidad, con espíritu amateur e integrador. Jugarás junto a algunos Guardias Suizos, sacerdotes que trabajan en oficinas de la Curia Romana, empleados del Vaticano y algunos de sus hijos. Sobre el terreno de juego -con la camiseta con la leyenda «Hermanos todos»- también habrá un joven futbolista con síndrome de Down, perteneciente a «Special Olympics», y también tres inmigrantes. Estos, después de un camino marcado por el abuso y la violencia, que los vio pasar por el campamento griego de Lesbos y luego por Italia, fueron acogidos por la Comunidad de Sant’Egidio y están viviendo una experiencia de integración. ¡Gracias a todos por aceptar formar parte del “equipo del Papa!” Es un equipo donde no hay barreras y que hace de la inclusión simple normalidad: esto está claro. Doy las gracias al Consejo Pontificio para la Cultura, al cardenal Ravasi, por esta acción concreta de testimonio en el mundo del deporte, especialmente a través de la «Athletica Vaticana», que vive todos los días esta misión de servicio entre los deportistas y las deportistas».
Dice monseñor Melchor Sánchez de Toca, subsecretario del Consejo Pontificio para la Cultura: “En la Biblia las islas representan los mundos lejanos y olvidados, los confines del mundo. Pero son objeto de especial atención por parte de Dios, que nunca deja de enviarles sus mensajeros para llevarles la buena noticia. Con este partido de fútbol queremos testimoniar la cercanía del Papa -que recientemente visitó Malta- y de la Iglesia a todas las islas, cercanas y lejanas, pequeñas y grandes”.
