(ZENIT Noticias / Washington, 09.06.2022).- Este mes de junio se cumplen veinte años desde que los obispos católicos de Estados Unidos se reunieron en Dallas (Texas) para redactar y aprobar la Carta para la protección de los niños y los jóvenes, en su compromiso de abordar el problema de los abusos sexuales del clero. Para conmemorar este momento, el arzobispo José Gómez, de Los Ángeles, presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos (USCCB), hizo una declaración.
El arzobispo de Los Ángeles dice que «Este mes se cumple el vigésimo aniversario de la aprobación de la Carta para la Protección de Niños y Jóvenes. No es un momento de celebración, sino de vigilancia y determinación continuas”, de ahí que “»En estos veinte años, nos hemos beneficiado enormemente de escuchar y trabajar con los supervivientes de los abusos. Estamos agradecidos por su valentía al compartir sus historias y por ayudar a la Iglesia a esforzarse por crear una cultura de protección y curación. Su testimonio ha conducido directamente a una reforma significativa en la Iglesia y a una mayor conciencia de los abusos sexuales en el mundo entero. Por los antiguos supervivientes y los futuros niños, es imperativo que permanezcamos atentos”.
Sobre el trabajo de la Iglesia a lo largo de estos años, Mons. Gómez subraya que “Desde la aprobación de la Carta, la Iglesia católica en Estados Unidos ha trabajado duro para cumplir nuestra promesa de apoyar la curación de los heridos por abusos sexuales, junto con sus familias. También nos hemos esforzado por ser fieles a nuestra promesa de proteger a los niños y jóvenes. Hoy en día, millones de niños y adultos han recibido formación para detectar los signos de un comportamiento abusivo, las denuncias de abusos sexuales se comunican a las fuerzas de seguridad locales, la comprobación de los antecedentes es la norma, las juntas de revisión formadas por expertos legos se reúnen para evaluar las denuncias y existen coordinadores de asistencia a las víctimas para ayudar a los supervivientes a encontrar ayuda”.
Finalmente, el presidente de los obispos estadounidenses dice que “En esta marca de dos décadas, nos mantenemos firmes con el compromiso del Papa Francisco, ‘de que se debe hacer todo lo posible para librar a la Iglesia del flagelo del abuso sexual de menores y abrir caminos de reconciliación y sanación para quienes fueron abusados”. Y finaliza: «Confiamos nuestras oraciones por los supervivientes de los abusos, por sus familias y por los que ejercen su ministerio en la Iglesia a nuestra Santísima Madre, que ofrece su amorosa protección a todos sus hijos. Pedimos su intercesión mientras continuamos en nuestra labor de proteger a los que están cerca del corazón de su Hijo, Jesús».