(ZENIT Noticias / Roma, 13.09.2022).- La visita del Papa a Kazajistán, un país de Asia Central, ha visibilizado el nombre de un país usualmente poco considerado. San Juan Pablo II ya lo había visitado pero esta nueva visita plantea la cuestión de cuál es la relación bilateral entre el país de los kazajos y el más pequeño del mundo.
Ya algo evidenció el Papa en su primer y concurrido discurso al llegar al País: «inmediatamente después de la independencia del país, hace treinta años, se establecieron las relaciones diplomáticas [entre Vaticano y Kazajistán], y estoy contento de visitar el país en la proximidad de este aniversario». En efecto, tras su independencia de la Unión Soviética en 1991, Kazajistán estableció relaciones diplomáticas con la Santa Sede poco tiempo después. De ahí que este 2022 las relaciones lleguen al aniversario número 30.
Sobre el estado actual de esas relaciones ha dicho el Secretario de Estados a los medios vaticanos:
El estado de las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y la República de Kazajistán podría definirse con dos palabras: frecuentes y fructíferas. Baste decir que la Santa Sede siempre ha participado activamente en todas las ediciones del Congreso y ha estado representada por una Delegación de alto nivel, encabezada por un Cardenal y esta vez por el Santo Padre. Kazajistán fue el primer país de Asia Central que firmó un acuerdo bilateral con la Santa Sede en 1998. También fue el primer país de Asia Central que visitó el Papa San Juan Pablo II en septiembre de 2001. La Santa Sede y Kazajistán siguen colaborando. Prueba de ello es que, durante la reciente visita al Vaticano del Viceprimer Ministro y Ministro de Asuntos Exteriores SE Mukhtar Tileuberdi, se firmó un Memorando de Entendimiento entre el Centro Médico Universitario de Kazajistán y el Hospital Pediátrico Bambino Gesù, y un Memorando de Entendimiento entre el Instituto de Estudios Orientales R.B. Suleimenov y la Biblioteca y Archivos Vaticanos. Este año se cumple el 30º aniversario de las relaciones diplomáticas. En esta ocasión, y en relación con la visita del Papa Francisco, se espera firmar un Acuerdo Suplementario sobre la concesión de visados y permisos de residencia a los misioneros extranjeros que prestan servicio en Kazajistán.
Con una población de poco más de 18 millones de habitantes, Kazajistán es el 9º país más grande del mundo por extensión geográfica. Mayoritariamente es musulmán y cuenta con unos 120 mil católicos.