(ZENIT Noticias / Ciudad de México, 11.10.2022).- En el marco del Congreso Mundial de las familias en Ciudad de México, celebrado en septiembre pasado, Zenit News Agency tuvo oportunidad de entrevistar al cardenal Müller quien participó como invitado especial en el Congreso (participó tanto en la ceremonia de inauguración y después estuvo en la Misa de clausura).
En declaraciones a Zenit, el cardenal destacó la importancia de estos congresos. Dijo que «es muy importante para toda la humanidad que vengan juntos todos los interesados a estos congresos, los componentes de todas las religiones o de filosofías para promover y defender la familia, pues hay muchos poderes contra las familias. El matrimonio es el núcleo de la familia hombre y mujer. Después ellos tienen como pareja hijos».
Agregó que «De esta forma la sustancia, la esencia de la familia no está sola, vivimos juntos con otras familias, en una comunidad, también en la consecución de las generaciones, los abuelos son importantes también, las próximas generaciones, la consecuencia del progreso de las generaciones a partir de la creación y por esto, para el progreso espiritual, intelectual y también físico-biológico, somos seres biológicos, todas las dimensiones; la familia es fundamental para la sociedad, para el Estado y también para la Iglesia, nosotros decimos que el matrimonio es hombre y mujer. La familia es la célula de la sociedad, esta crece en el cuerpo de la Iglesia, en el cuerpo de Cristo.
Preguntado por ZENIT acerca de la crisis en que vive la institución de la familia natural con relación a la falta de compromiso de los más jóvenes, el cardenal respondió: «nosotros somos hombres, somos personas y no cosas o animales que viven según los instintos, que no tienen la capacidad de reaccionar, de hacer decisiones voluntarias con la libre voluntad y por eso para nosotros es muy importante orientarnos en el pensamiento y tener valores fundamentales, metas concretas, ¿Cuál es el sentido profundo de la vida humana? Esta es la pregunta fundamental, no estamos aquí al azar por alguna circunstancia, tenemos que agradecer nuestra vida a Dios, nuestro Creador y nuestro Salvador. Dios ha creado a los hombres y a las mujeres como Cristo, es la gramática básica de toda la creación».
El cardenal también puntualizó que «Por eso es tan importante no hacerse los locos con esta propaganda que siembra el daño a los hombres, el fascismo, el marxismo, el liberalismo y todas estas ideologías del género que tenemos hoy».
Sobre la ideología de género precisó que es una ideología «que hace un gran daño a los individuos y a toda la humanidad, también inclusive a las familias; por eso es muy importante orientarse con la palabra de Dios. ¡Dios es nuestro Creador, Dios sabe mucho más que todos los hombres juntos, todos los filósofos, todos los pensadores! Sabe mejor qué es bueno para nosotros, porque es el Dios de la verdad». El cardenal Müller también dijo a ZENIT que «Dios es bueno en su persona y por eso, cuando vivimos con los mandamientos de Dios, con la Palabra de Jesucristo, de los profetas de Jesucristo, el Hijo de Dios, esto nos hace felices. Y la felicidad interna no solo está con algunas cosas materiales, la felicidad interna está cuando deseamos, cuando vivimos en Dios, cuando Dios vive en nosotros, este es el buen camino para nosotros, para todos nosotros. Y los jóvenes deben tener coraje de identificarse con su propio cuerpo».
Finalmente, el cardenal Müller dijo a ZENIT que un joven debe tener presente que es «creado como hombre o como mujer, varón o mujer, para una relación hombre – mujer. La gramática que uno debe saber para ser feliz en toda su vida y vivir, vivir juntos en el amor entre el esposo y la esposa, los padres con los niños, esto los hará libres y felices a nivel de la naturaleza humana, pero también en la relación de la gracia para con Dios», resaltó.