Por: Rafael Llanes
(ZENIT Noticias / Ciudad de México, 05.03.2023).- Diócesis de la zona maya, en el sur de México, buscan incluir en misas y celebraciones católicas elementos comunicativos propios de los indígenas. Como toda variante, pide aportación enriquecedora y equilibrio, que los obispos de la región buscan.
Las comunidades mayas de Chiapas tienen rasgos culturales propios, como la participación en la vida social basada en la palabra, de modo que quien queda en silencio no manifiesta estar de acuerdo, sino desaprobación, diferente a nuestro concepto de que quien calla otorga. Por esto, muchos sacerdotes en las comunidades tzotziles, lacandonas o tzeltales dan la palabra a todos para garantizar que comulgan con la Palabra de Dios, so pena de parecer dictadores cuando solo habla el celebrante. ¿En qué forma aplicar características culturales de estos pueblos en la Liturgia?
Como en muchos lugares del planeta, los mayas manifiestan las tradiciones en cantos, danzas, gestos, colores y símbolos. La inculturación de la Liturgia pedida por el Vaticano II explotó en variadas manifestaciones tras el Concilio, algunas excéntricas, que se equilibraron años después. Pero ¿hasta dónde queda pendiente esta labor?
La Diócesis de San Cristóbal, en el sur de México, enviará al Papa Francisco la propuesta formal de incluir ritos de indígenas mayas en las misas católicas, plan explicado por el Cardenal Felipe Arizmendi Esquivel, coordinador del trabajo. Quizás sea un paso más en la inculturación de la fe.
En abril, la asamblea de la Conferencia Episcopal Mexicana revisará el proyecto y se llevará a Roma en mayo por el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez, presidente de la comisión de pastoral litúrgica.
La Agencia EFE habla de danza, música y participación de las mujeres al comunicar el proyecto: parece un enfoque europeo y laico, pues los obispos y agentes de pastoral de las zonas mayas ponen el acento en los símbolos de solidaridad, adoración a Dios y caridad por encima de las simples formas exteriores o sociales.
La propuesta tiene cariz importante porque, en las selvas de los Estados de Yucatán, Campeche y, sobre todo, en Quintana Roo, todavía existen los tatiches o sacerdotes mayas, laicos que recitan letanías en maya y latín que llaman misa y reparte tortilla de maíz que denominan hostia, bautizan e imparten bendiciones, los cuales ocuparon el puesto de los presbíteros católicos que dejaron la selva para ocupar los cargos de los jesuitas en las ciudades tras su expulsión de 1769. Hablar, pues, de misas mayas, tiene el riesgo de confundirlas con las celebraciones del clero católico.
El encuentro de esta semana (última de febrero y primera de marzo) en Chiapas con Monseñor Aurelio García Macías, subsecretario del dicasterio para el culto divino y los sacramentos del Vaticano, con sacerdotes y catequistas indígenas, estudió la necesidad y oportunidad de manifestar la fe del Evangelio y de la Iglesia en los ritos de los creyentes mayas, para quienes los presbíteros ya celebran algunos sacramentos en sus lenguas originales.