(ZENIT Noticias / Colonia-Roma, 02.01.2024).- Tras la publicación de la Declaración Fiducia Supplicans, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe adelantó en una entrevista que tendría un encuentro con obispos alemanes para seguir adelante en el diálogo sobre el proceso denominado “Camino Sinodal Alemán” y en el que hay tres temas álgidos: la ordenación sacerdotal de mujeres, la bendición de parejas del mismo sexo y una estructura supra-episcopal vinculante para toda la iglesia católica en el país. Con relación a los temas, el tercero fue de hecho prohibido por ser canónicamente improcedente y los dos primeros ya fueron contestados por el Secretario de Estado del Papa notificando a los obispos alemanes que eso no va a cambiar.
Sin embargo, es ahora el prefecto del Dicasterio de la Fe quien refuerza lo anticipado por el Secretario de Estado: lo ha hecho en una entrevista al periódico alemán Die Tagespost. Descarta también una valoración moral distinta de los actos homosexuales y la posibilidad de ordenación sacerdotal a mujeres. El prefecto del Dicasterio de la Fe anota que, aunque el Papa permitió que se investigue más a fondo la relación mujer-sacramento del orden, el mismo Pontífice prohibió la discusión pública del tema.
En una parte de la entrevista dice el cardenal Fernández: “Cuando escuchas algunas de las consideraciones que se hicieron en el contexto del Camino Sinodal alemán, a veces parece como si una parte del mundo está particularmente «ilustrada» para comprender lo que los otros pobres idiotas no pueden entender porque son cerrados o medievales, y luego esta parte «ilustrada» cree ingenuamente que gracias a ello toda la Iglesia universal será reformada y controlada”. El prefecto del Dicasterio para Doctrina de la Fe añade “que en una parte del mundo la crisis provocada por los abusos sexuales no pueda resolverse con la ayuda de decisiones que contradicen la enseñanza de la Iglesia universal”. Y puntualiza: “en mi opinión, no es incluso posible ni razonablemente justificado”.
Abordando el tema de la declaración Fiducia Supplicans que permite la bendición de parejas del mismo sexo o de divorciados vueltos a casar, el prefecto recuerda que el Papa “preserva la enseñanza que la Iglesia ha desarrollado y enriquecido a lo largo de los siglos con la escucha del Evangelio, pero que también es capaz de ponerlo en diálogo con la Iglesia para hacer realidad las realidades concretas”. También dice que a menudo las vidas tan heridas de los creyentes entran en contacto no con la vida de un «humano» abstracto, sino con la vida real de muchos hombres y mujeres en los ambientes más diversos.
