Fady Noun
(ZENIT Noticias – Asia News / Beirut, 16.01.2024).- En estas horas se están llevando a cabo frenéticas negociaciones diplomáticas encabezadas por Estados Unidos y Europa junto con algunos aliados en el mundo árabe y el Golfo, entre ellos Qatar y Jordania, en un intento de evitar una expansión del conflicto de Israel en la Franja con el ingreso del Líbano. Al mismo tiempo, las voces hostiles en el País de los Cedros contra el «frente de apoyo» a Gaza son cada vez más fuertes y numerosas frente a la intervención de Hezbollah en el sur y los reiterados ataques con misiles, aunque confirman su solidaridad con la población palestina bajo ataque.
El conflicto entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza, que dura ya tres meses, podría «hacer metástasis» en la región, como señaló ayer el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, que en este momento se encuentra en una nueva gira por los países árabes e Israel. Por su parte, desde el Líbano, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, declaró: «Creo que la guerra se puede evitar, que se debe evitar y que la diplomacia puede prevalecer […]» y concluyó subrayando que » la guerra es la peor opción”. A su llegada al Líbano, cuando Israel acababa de eliminar al número dos de Hamás Saleh el-Arouri en un bastión de Hezbolá, Borrell fue informado por el comandante en jefe de la Unifil, general Arnoldo Lázaro, de los “consiguientes riesgos de escalada a lo largo de la Línea Azul”.
Un capital de solidaridad
Sin embargo, y pese al capital de solidaridad y cercanía del que goza la causa palestina (debido en parte al encarnizamiento del ejército israelí contra la población de Gaza), la gran mayoría de los libaneses, sobre todo en la frontera, sigue siendo contraria al «frente de apoyo» de Hezbolá. La decidida oposición también incluye cualquier acción armada en la que los palestinos utilicen el Líbano como base de ataque.
“La guerra en Gaza se ha extendido al sur del Líbano contra la voluntad de los libaneses y de los países amigos”, denunció el patriarca maronita cardenal Bechara Raï con motivo del Día Mundial de la Paz. El jefe de la Iglesia maronita volvió a referirse en estos días a la situación de tensión y el riesgo de que el Líbano sea involucrado, invitando a las partes implicadas y a la comunidad internacional a resolver el conflicto mediante la negociación, la política y la diplomacia. Por último, el cardenal señaló que el Líbano está «protegido de un conflicto con Israel por la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que obliga a Hezbolá a retirarse al norte del río Litani.
La preocupación de la máxima autoridad cristiana también es compartida por miembros de la representación musulmana local. “Nuestra comunidad también tiene voz y voto en el futuro del Líbano”, insistió el muftí de la República (sunita), durante un acto social en el que defendió las instituciones del “mini-Estado” que representa Hezbolá.
En su programa, uno de los comentaristas de televisión con mayor audiencia del Líbano, Marcel Ghanem, no pudo evitar expresar su tristeza por tantos hombres que sacrifican sus vidas en el sur del Líbano. Entre los que también estarían 140 combatientes y cuadros del partido proiraní. Un sacrificio, añadió el experto, que aparentemente no ha tenido ningún impacto en los combates en curso en la Franja.
Ataque de piratas informáticos en el aeropuerto Hariri
Esta hostilidad adquirió ayer contornos y forma de espectáculo por obra de piratas informáticos que atacaron los paneles electrónicos de información sobre los vuelos que llegan y salen del aeropuerto internacional Rafic Hariri de Beirut. En vez de los horarios de los aviones y sus rutas, apareció un mensaje de texto hostil a Hezbolá dirigido directamente a su líder Hassan Nasrallah: «Será tu responsabilidad – decía – si el Líbano es arrastrado a la guerra».
“El aeropuerto internacional de Beirut no es el aeropuerto privado de Hezbolá o de Irán, no iremos a la guerra en nombre y por cuenta de otro […]. Que el aeropuerto se libere del yugo del mini-Estado», pudieron leer los pasajeros en tránsito en lugar del acostumbrado horario de los vuelos. El ciberataque tuvo un amplio seguimiento en las redes sociales, donde el mensaje y las imágenes del panel rebotaron en varios perfiles y rápidamente se hicieron virales en el país.
Acompañado por el logo de Jounoud el-Rab (los Soldados del Señor) y el de la cuenta on line “Saheb el Kalima” [“Yo tengo la palabra”], el texto apareció en las pantallas del aeropuerto alrededor de las 5 de la tarde de ayer domingo 7 de enero. Sin embargo, en un vídeo compartido posteriormente en las redes sociales, el grupo Jounoud el-Rab, que se hizo famoso en Ashrafieh, el barrio cristiano de Beirut, por su lucha contra el movimiento LGBTQ+, negó cualquier responsabilidad en el hackeo. Por el contrario, algunos miembros del movimiento afirmaron que el uso de su logo en el ataque era «un intento malicioso de sembrar el disenso».
Por su parte un ex ministro, bajo condición de anonimato, confió que «Israel no se salvará con la guerra». “Israel sólo podrá vivir en paz si les reconoce un futuro a los palestinos -advierte el político-. Y lo que digo no son palabras vacías, sino de sano realismo. En las relaciones internacionales, amar significa dar a los demás la misma oportunidad de construir un futuro duradero que nos damos a nosotros mismos. Pero ¿dónde podemos encontrar – concluye no sin cierto desaliento – las figuras que, en ambos lados, estén a la altura de este desafío histórico?”.