(ZENIT Noticias / Roma, 19.03.2025).- Chantal Delsol, intelectual de la derecha francesa, es tenida en cuenta por Le Figaro en un artículo del 28 de enero, donde se anota una referencia notoria: «En medio siglo, la catedral de Notre-Dame podría ser una mezquita”.
Chantal Delson es filósofa, historiadora y novelista francesa, discípula de Julien Freund, de línea liberal conservadora. En el artículo en el periódico parisino expuso que ”somos responsables de las políticas de nuestros antepasados, que colonizaron y luego atrajeron a estas poblaciones por razones económicas. Ahora están aquí, y también vienen porque les hemos enseñado nuestro idioma. Deberíamos haber hecho esfuerzos inmensos para integrarlos; me refiero a esfuerzos humanos y no solo al envío de dinero por helicóptero…”.
La filósofa ha publicado “Insurrection des particularités” en la editorial Cerf, analizando el periodo de dolorosa transición que atraviesa Occidente. Destaca la desilusión ante las utopías de la ilustración y el hundimiento del cristianismo, creando el pensamiento ultraindividualista, que consagra lo particular en detrimento de lo universal.
Señala que el individualismo provoca que las sociedades occidentales se caractericen por la quiebra en el deseo de formar comunidad, mientras los inmigrantes árabes o latinoamericanos tienden a reforzarlas.
La intelectual francesa subraya: “Fracasamos en integrarlos porque la ideología de la inclusión prohíbe toda integración. Además, estamos cayendo demográficamente mientras ellos aumentan, por razones culturales y religiosas”.
Delson hace ver una preocupación: «Finalmente, mientras estas cuestiones se resuelven cuando la cultura de los inmigrantes es cercana, como sucedió con los italianos en Francia o los ucranianos hoy en Polonia, las masas de musulmanes, con mujeres esclavizadas, son casi imposibles de asimilar, incluso si quisiéramos”.
El crecimiento demográfico de estas minorías se suma a la fuerza de su mentalidad, que es débil entre los occidentales de cultura postmoderna: “Asimismo, la separación ideológica crece cada vez más entre nuestras sociedades y una parte de estos musulmanes, sueñan con instaurar un califato. Se ve claramente: se pueden hacer esfuerzos por deportar a los presuntos terroristas, pero es prácticamente imposible encontrar respuestas políticas para todos ellos”.
“Por eso mismo, no sería sorprendente que, en menos de un siglo, Notre Dame se transformara en una mezquita, y nuestros bisnietos, cuando estén educados y hablen idiomas, emigren a América, donde continuarán inventando patentes y escribiendo libros a orillas del Ohio”, dice.
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