(ZENIT – 16 oct. 2019).- Paolo Ruffini, prefecto del Dicasterio para la Comunicación del Vaticano, ha comunicado a los periodistas que en la Asamblea Sinodal se ha manifestado la necesidad de no «detenerse en los temas individuales» sino de «encontrar una visión global, unitaria, escuchar al Espíritu, retomar el celo apostólico».
El prefecto, miembro de la Comisión de información del Sínodo, lo ha anunciado este mediodía, miércoles, 16 de octubre de 2019, en el briefing ofrecido a los periodistas sobre el transcurso de la Asamblea Especial del Sínodo Amazónico.
De este modo, ha descrito que esta manifestación se dio ayer en las intervenciones libres, y que «surgió de una forma muy fuerte y algo sorprendente una emergencia compartida por la Asamblea Sinodal, ya hubo resonancia también en los círculos».
Esta mañana, en el Aula Sinodal, también se dijo que «no hay que detenerse en los temas individuales dividiendo de esta forma el proceso sinodal que, en cambio, tiene como fin la de encontrar una visión global, unitaria, escuchar al Espíritu, retomar el celo apostólico»
En caso contrario, señalaron los participantes, «corremos el riesgo de enfocarnos en un tema específico y no en un camino global, y este enfoque corre el riesgo de traicionar el Espíritu mismo del Sínodo, tanto se refiere al tema amazónico y la universalidad de la Iglesia», ha explicado.
«Es como si estuviéramos perdiendo algo… ¿Cuál es el norte del Sínodo?», ha planteado Ruffini. «Tenemos que mirar al árbol, no a la rama», ha indicado. «Hay que dejar que actúe el Espíritu Santo, que nos brinde la gracia».
Camino de discernimiento, no pequeñas soluciones
«Hay una unidad espiritual», ha comentado el padre Giacomo Costa, en el briefing sobre la Asamblea sinodal. «Esto no es fácil de captar por la sociedad civil pero lo que ocurrió fue un surgir después de tantas intervenciones constructivas, opiniones diversas, pero todas encaminadas hacia el cuidado de la casa común. En particular, un cuidado pastoral y social para la Amazonía, hay esta percepción de la necesidad de un paso más, un paso ulterior, un salto de calidad».
Así, el secretario de la Comisión de Información del Sínodo ha recordado que el Sínodo es «un camino de discernimiento, no se puede reducir todo a pequeñas soluciones, pequeños ajustes», y ha matizado que en cierta medida, algo de lo que ocurre está también en la Evangelii Gaudium, «la unidad que prevalece sobre el conflicto». Ha advertido que «si nos quedamos atrapados en los conflictos, perdemos la perspectiva, los horizontes se limitan, la realidad misma es fragmentada».
«No sabemos todo esto a qué llevará –ha concluido– pero también en los grupos, esto ha dado mucha libertad de palabra, todos se expresaron de una forma muy personal, porque se busca caminar juntos. Realmente fue un momento inesperado, pero muy fuerte al mismo tiempo».
Círculos menores
Los días 16 y 17 de octubre se trabaja en los círculos menores en el Aula Sinodal, y el jueves 17 por la tarde habrá trabajo en grupos, anunció la semana pasada el secretario de la Comisión de Información.
A diferencia del Sínodo anterior, “esta vez habrá un solo informe de cada grupo” aclaró el padre Costa, que se entregará el 17 de octubre por la tarde. La última semana se dedicará a recibir el proyecto del documento final, discutirlo, y finalmente el sábado 26 se votará, concluyendo la Asamblea el domingo 27 se clausurará.