(zenit – 14 oct. 2020).- Sin baño de multitudes y sin saludos a un metro de distancia, así ha sido la audiencia general del Papa Francisco de la mañana de este miércoles 14 de octubre de 2020: cumpliendo con las medidas sanitarias, simplemente saludó a la multitud desde el estrado.
Mientras cuatro guardias suizos han sido puestos en aislamiento en los últimos días, después de dar positivo en las pruebas de coronavirus, el Santo Padre llegó al Aula Pablo VI directamente desde el podio. Los participantes habían sido advertidos por los intérpretes que no los saludaría personalmente, como lo hace cada semana al cruzar los pasillos, estrechando las manos, charlando con los fieles reunidos detrás de las barreras.
“Me gustaría hacer lo de siempre”, confió durante los saludos en varios idiomas: “bajar y acercarme a vosotros para saludaros, pero con las nuevas prescripciones, es mejor mantener la distancia. Saludo a los enfermos con todo mi corazón desde aquí”.
“Estáis a una distancia segura, como debéis estar; pero cuando yo bajo, todos vienen… y existe el riesgo de contagio”, añadió: si cada uno lleva “su máscara, manteniendo la distancia, podemos continuar las audiencias”.
“Perdonadme si hoy os saludo desde lejos”, dijo Francisco, “pero creo que si todos seguimos las prescripciones de las autoridades como buenos ciudadanos, esto ayudará a poner fin a esta pandemia”.
La audiencia general concluyó con un cara a cara en el que el Papa cruzó el escenario, saludando con la mano ante los aplausos de los participantes que estaban sentados a distancia y con máscaras.