Por primera vez en el mundo un parque de atracciones acoge una muestra sobre un papa, haciendo homenaje a la extraordinaria vitalidad de Juan Pablo II y a su capacidad de valorizar el sufrimiento, como hizo hasta el último instante, pero también con los momentos de alegría y de sana diversión.
El parque está situado en Valmontone, a 45 kilómetros de Roma. Inaugurado en 2011, en su segunda temporada tuvo casi un millón de visitantes.
El 18 de mayo, a los 93 años del nacimiento de Karol Wojtyla, el parque Rainbow MagicLand inaugura la exposición Al altar de Dios, que incluye fotografías, vídeos y fragmentos de audio de los discursos más célebres del papa Juan Pablo II. Esta exposición abrió oficialmente las celebraciones de Roma para la beatificación del pontífice en 2011.
«Cuando nos propusieron acoger la exposición sobre Wojtyla –comenta Stefano Cigarini, administrador delegado del Rainbow Magicland– en un primer momento nos quedamos perplejos e íbamos a contestar que no. Pero después pensamos que la vida de Juan Pablo II en un cierto sentido fue como una ‘montaña rusa’ y que el significado era este. Todos, creyentes y no, le hemos seguido con gran expectación en su ascenso a la cima del milenio, conteniendo la respiración y lanzándonos con él en el nuevo siglo. Desde la caída del muro al diálogo con otras religiones, de la petición de perdón por los pecados de la Iglesia hasta la agonía extrema, ninguno como él ha sabido transmitir el mismo tiempo seguridad y emociones».
La iniciativa quiere también valorizar la estrecha unión de Juan Pablo II con los niños, jóvenes y familias, huéspedes privilegiados del parque, en la perspectiva de la Nueva Evangelización, tan querida por el papa Francisco, que invita a la Iglesia a «salir de sí misma».
Hasta el 22 de octubre del 2013, fiesta litúrgica del beato, en las salas adyacentes al Planetario 4D de MagicLand será posible escuchar y ver de nuevo al beato Juan Pablo II, a través de sus discursos en difusión cinematográfica y la galería fotográfica, reorganizada y actualizada en cinco secciones, junto con las esculturas de Ann Gualk, autora de la obra El papa peregrino.
La muestra llega a Valmontone desde Madrid y Varsovia, donde fue acogida por los cardenales Rouco Varela y Nicz.
