Los ataques del grupo terrorista ISIL en Irak han provocado la estampida de los 3 mil cristianos de Mosul. Por eso, Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) ha concedido una primera ayuda de emergencia por 100 mil euros para los cristianos que han huido como consecuencia de los ataques de comienzos de junio.
El 5 de junio, presuntos partidarios de la organización terrorista ISIL (Estado Islámico en Irak y el Levante) comenzaron a tomar Mosul, la segunda ciudad de Irak. La mitad de la población –y entre ella, todos los habitantes cristianos– huyeron. Mientras tanto, ISIL sigue avanzando en Irak y tomando otras ciudades.
De acuerdo con los datos aportados por el arzobispo caldeo de Mosul, Emil Shimon Nona, al estallar las luchas todos los aproximadamente 3 mil habitantes cristianos de Mosul abandonaron inmediatamente la ciudad; encontraron refugio en su mayoría en los pueblos de la cercana planicie de Nínive. Asimismo explicó que la Iglesia ha alojado provisionalmente a los refugiados en escuelas, salas de catequesis y casas abandonadas. El arzobispo afirmó que «no se sabe si las familias podrán volver alguna vez a Mosul», según indica a AIN.
La ayuda de emergencia está prevista para la primera atención de los refugiados, que han dejado todas sus pertenencias en Mosul. Al parecer, algunos cristianos han vuelto a Mosul, pero la mayoría de las familias tiene miedo y continúa en los alojamientos provisionales. El arzobispo Shimon Nona, indica que actualmente atienden a mil familias refugiadas.
Regina Lynch, directora de proyectos de AIN explica: «Nos sentimos muy unidos a esta Iglesia, con la que compartimos su calvario y sus preocupaciones desde 1983. Estos sufrimientos sin fin son una herida abierta para nosotros. Queremos que los cristianos de Irak sepan, más que nunca, que los cristianos del resto del mundo no los dejan solos, que rezan por ellos y les ayudan, en la medida de lo posible. Además de los proyectos corrientes que tenemos deseamos enviar esta ayuda de emergencia para mostrarlo así a nuestros hermanos y hermanas».
Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), fundación de la Santa Sede, fue promovida por el papa Pío XII e iniciada por P. Werenfried van Straaten en 1947, para ayudar pastoralmente a la iglesia necesitada o que sufre persecución en cualquier parte del mundo, en un período marcado por la Guerra Fría y la persecusión soviética. Hoy cuenta con oficinas en 17 países y desarrolla proyectos en 140. Durante los últimos cinco años, Ayuda a la Iglesia Necesitada ha prestado ayudas en Irak por un importe de unos 2,4 millones de euros.