(ZENIT Noticias / Roma, 08.06.2023).- Un día después de haber sido sometido a operación, el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede dio tres notificaciones a los medios de comunicación.
En la primera de ellas –muy corta– se refirió que el Papa Francisco «transcurrió la noche bien». Hacia el medio día del jueves 8 se dio una explicación más amplía:
«El personal médico que sigue el postoperatorio del Pontífice nos informa de que el Papa Francisco ha pasado una noche tranquila y ha podido descansar largo rato; se encuentra en buen estado general, alerta y respira espontáneamente. Los exámenes rutinarios de control son buenos. Guardará el necesario reposo postoperatorio durante todo el día. El Papa está informado de los mensajes de cercanía y afecto que le han llegado en las últimas horas y expresa su gratitud, al tiempo que pide que sigan rezando por él».
Una tercera referencia llegó pasadas las 7 de la tarde, hora de Roma, evidenciando que «Su Santidad el Papa Francisco ha pasado un día en reposo».
Por cuanto refería la declaración, «El personal médico que sigue el postoperatorio del Pontífice informa de que ha sido alimentado con una dieta de agua. Sus parámetros hemodinámicos y respiratorios son estables. El curso postoperatorio parece regular». Por la tarde del Jueves de Corpus Christi el Papa recibió la Eucaristía.
Entre los muchos mensajes de cercanía, le ha emocionado el cariño de la familia del pequeño Miguel Ángel, bautizado por el Papa Francisco el pasado 31 de marzo durante su visita a las plantas de oncología y neurocirugía pediátrica del hospital, que le ha enviado un cartel deseándole una pronta recuperación.
El Santo Padre quiso agradecer personalmente a la madre con una breve llamada telefónica.