CIUDAD DEL VATICANO, martes, 29 julio 2008 (ZENIT.org).- A través de la Pastoral Social (CEPS), la Comisión Episcopal Mexicana (CEM) ha apoyado la participación de la Iglesia Católica en la XVII Conferencia Internacional sobre el VIH y sida que tendrá lugar en México DF del 3 al 8 de agosto.
Según explica la agencia vaticana Fides, las conferencias internacionales sobre el sida, que se celebran cada dos años, reúnen a más de 20.000 profesionales de la salud, científicos, representantes gubernamentales, periodistas, activistas, líderes corporativos personas que viven con VIH y sida, así como líderes y representantes religiosos.
Las Conferencias brindan amplias oportunidades para intercambios y creación de contactos en todos los niveles de la atención de la epidemia y la respuesta a ésta.
Además se podrán presentar nuevas e importantes investigaciones científicas y para entablar diálogos productivos y estructurados que giren en torno a los mayores desafíos que enfrenta la respuesta global frente al sida.
Recordando que la abstinencia y la fidelidad son puntos claves para luchar contra el VIH, los prelados de México han remarcado el esfuerzo de los equipos médicos para atender a millones de enfermos.
En este sentido, en colaboración con la Comisión Episcopal para la Pastoral de los Medios de Comunicación, la CEPS ha querido promover el compromiso que, la Iglesia católica tiene con estos enfermos.
«Desde nuestra propia identidad como CEPS, trabajamos para promover, fortalecer y acompañar a los sujetos sociales y eclesiales con el fin de contribuir para que la dimensión social de la fe esté presente en la tarea evangelizadora de la Iglesia» aseguran en un comunicado.
Por ello, resaltan que «la postura de la Iglesia católica a favor de la abstinencia y la fidelidad, y el esfuerzo por atender a millones de enfermos de sida es una contribución muy valiosa para defender la vida y la salud de tantos seres humanos necesitados de un apoyo fraterno, que es siempre la base de cualquier justicia social».
Por otro lado, la Iglesia católica en México impulsa la campaña «Esperanza de Vihda», en colaboración con las Comisiones Episcopales de Pastoral de la Salud, Familiar y Juvenil para contribuir a la lucha contra la estigmatización y discriminación de la enfermedad.
Esta campaña está dirigida, en primer lugar, hacia la propia Iglesia para que genere un mayor número de acciones de solidaridad a favor de todas las personas que viven con VIH y el sida.
En esta línea el apoyo más importante que puede hacer la Iglesia es contribuir en la lucha contra la estigmatización, la autoestigmatización y la discriminación por su larga tradición de compasión y solidaridad. Perseverar en su labor firme y ejemplar en la defensa de los derechos humanos de todas las personas infectadas por el VIH y del don divino de su dignidad
El proyecto «Esperanza de Vihda» está dirigido concretamente «a los agentes de Pastoral Social y representantes del Consejo Permanente de Cáritas como colaboradores inmediatos en la realización del proyecto, partiendo de sus Provincias Eclesiásticas, diócesis y parroquias, a las personas portadoras del VIH/sida y a sus familias, a los jóvenes. A la misma sociedad para que tome conciencia de que vivimos en un ¡mundo con VIH/sida’ que nos afecta a todos».