(ZENIT – Roma). – El cardenal Pietro Parolin, en el XIX congreso de la Unión Italiana de la Prensa Católica, que se realizó el sábado pasado en la ciudad de Matera, con el título “Desafíos en el periodismo en los tiempos de Francisco”, señaló que un buen periodismo tiene que superar lemas e ideologías, y poner siempre en el centro de las noticias a la persona y su dignidad.
El secretario de Estado del Vaticano, aseguró que la buena información puede hacer mucho en favor de la democracia, y pidió “dar voz a los que no la tienen y estar al servicio de todos los ciudadanos”.
El cardenal, que llevó al congreso el saludo y la bendición del papa Francisco, señaló que para el periodista católico la “fe no se opone a la investigación”.
En la reunión, titulada “Desafíos en el periodismo en los tiempos de Francisco”, el cardenal recordó que «las palabras nunca son neutrales porque guían para entender y por lo tanto influyen en nuestro comportamiento”.
“La misión más noble del periodismo –continuó el purpurado– es dar voz a los que no la tienen, porque la credibilidad se basa en la integridad, la confianza, la honestidad y la coherencia del periodista”.
El cardenal añadió que “una información libre de intereses parciales tiene que construir, día tras día, caminos de integración”, y citando a Benedicto XVI y a Francisco, sobre los nuevos medios de comunicación, dijo que “en la era de Internet, la misión del periodista no es llegar primero, sino llegar cada vez mejor”.
Al concluir la intervención, el secretario de Estado recordó el papel social que el sindicato de la prensa católica juega, basándose siempre en los “principios de la laicidad y la ciudadanía” y “practicando como laicos comprometidos, especialmente en los medios laicos, el diálogo de la Iglesia con el mundo, como indica el Concilio Vaticano II».
El Cardenal Pietro Parolin. (Wikimedia Commons)
Card. Parolin: 'El buen periodismo pone en el centro a la persona y su dignidad'
“Desafíos en el periodismo en los tiempos de Francisco”. La misión del periodista no es llegar primero, sino llegar cada vez mejor