(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- La terrible masacre que ha tenido lugar en Orlando, con un número altísimo de víctimas inocentes, ha suscitado en el papa Francisco “los sentimos más profundos de execración y de condena, de dolor y de turbamiento” frente a esta «nueva manifestación de locura homicida y de odio insensato”. Así lo asegura el padre Federico Lombardi, director de la sala de prensa de la Santa Sede, tras conocerse la noticia de la muerte de al menos 50 personas en la madrugada de este domingo en un bar de ambiente gay en Orlando, Florida.
De este modo, el Pontífice se une en la oración y en la compasión “al fuerte sufrimiento de las familias de las víctimas y de los heridos y los encomienda al Señor para que puedan encontrar consuelo”.
Todos deseamos –concluye el comunicado de la Santa Sede– que se puedan identificar y combatir eficazmente lo antes posible las causas de esta violencia horrible y absurda, que perturba tan profundamente el deseo de paz del pueblo americano y de toda la humanidad.
Por su parte, el obispo de Orlando, monseñor John Noonan, envió su condolencia y condena al ataque a través de su cuenta de twitter: “Oramos por las víctimas del tiroteo en Orlando de esta mañana, por sus familias y los socorristas. Que la misericordia del Señor esté con nosotros”.
Los primeros indicios apuntan a un único tirador que murió abatido por la policía. Las autoridades todavía no han revelado la identidad del tirador, pero, según la cadena televisiva CNN, se trata de Omar Saddiqui Mateen, un hombre nacido en Florida de padres afganos.
El papa Francisco en la catequesis de la audiencia de este miércoles
El Papa envía su pésame por el ataque en un bar en Orlando
El asaltante se ha cobrado la vida de al menos 50 personas y decenas de heridos