Benedicto XVI: La curación es un anticipo de la victoria de Cristo

En el Ángelus, el papa comentó el evangelio del día

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CIUDAD DEL VATICANO, domingo 5 febrero 2012 (ZENIT.org).- A las 12 horas de este domingo, Benedicto XVI se asomó a la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico Vaticano para recitar el Ángelus con los fieles y peregrinos reunidos en la plaza de san Pedro.

Benedicto XVI, antes de la oración mariana, comentó el Evangelio del día, en que Jesús cura a varios enfermos.

“Los cuatro evangelistas coinciden en testimoniar que la liberación de enfermedades y padecimientos de cualquier tipo, constituían, junto con la predicación, la principal actividad de Jesús en su vida pública”, afirmó el papa.

“De hecho –añadió–, las enfermedades son un signo de la acción del mal en el mundo y en el hombre, mientras que las curaciones demuestran que el Reino de Dios –y Dios mismo–, está cerca. Jesucristo vino para vencer el mal desde la raíz, y las curaciones son un anticipo de su victoria, obtenida con su muerte y resurrección”.

El papa subbrayó que cuando llega la enfermedad “experimentamos realmente que no somos autosuficientes, sino que necesitamos de los demás”. “En este sentido podríamos decir –añadió–, de modo paradójico, que la enfermedad puede ser un momento que restaura, en el cual experimentar la atención de los otros y ¡prestar atención a los otros!”.

Ante la enfermedad, que el Benedicto XVI calificó de “ataque del mal”, hay que reaccionar con la cura apropiada “pero la Palabra de Dios nos enseña que hay una actitud determinante y de fondo para hacer frente a la enfermedad, y es la fe en Dios, en su bondad. Lo repite siempre Jesús a la gente que sana: Tu fe te ha salvado. Incluso de frente a la muerte, la fe puede hacer posible lo que es humanamente imposible”.

El papa recordó también que el próximo sábado 11 de febrero, fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, se celebra la Jornada Mundial del Enfermo.

“Hagamos también como la gente en tiempos de Jesús –exhortó–: presentémosle espiritualmente a todos los enfermos, confiando en que Él quiere y puede curarlos. E invoquemos la intercesión de Nuestra Señora, en especial por las situaciones de mayor sufrimiento y abandono. María, Salud de los enfermos, ¡ruega por nosotros!”.

Para leer las palabras completas del papa, enlazar aquí:http://www.zenit.org/article-41422?l=spanish.

Después del rezo del Ángelus recordó, a la hora de saludar a los grupos lingüísticos, que este domingo en Italia se celebraba la Jornada por la Vida, “iniciada para defender la vida por nacer”. Este año el Mensaje de los obispos italianos propone el tema: «Jóvenes abiertos a la vida». “Me uno a los pastores de la Iglesia en Italia al afirmar que la verdadera juventud se desarrolla con la acogida, el amor y el servicio a la vida”, dijo Benedicto XVI.

Se dirigió también en español a los peregrinos hispanohablantes. “Saludo con afecto a los peregrinos de lengua española, en particular al grupo de fieles de distintas parroquias de Sevilla, así como al grupo de alumnos y profesores de Zafra, Montánchez y Cáceres”.

Y les resumió el contenido de sus palabras en italiano: “El Evangelio de hoy presenta a Jesús que une estrechamente su predicación y cuidado por los enfermos a una intensa oración. Este modo de actuar del Maestro se prolonga también hoy en la vida y misión de la Iglesia. Que la Virgen María asista a cada uno de sus hijos para saber conjugar siempre la actividad apostólica y misionera con una ferviente plegaria a Dios. Feliz domingo”.

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ZENIT Staff

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