(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- Miles de personas procedentes de todos los rincones del mundo, se han reunido un miércoles más en la plaza de San Pedro, con ocasión de la audiencia general del papa Francisco. El Santo Padre, antes de la catequesis, ha pasado por los pasillos de la plaza con el papamóvil para responder desde la cercanía a la calurosa bienvenida que le daban los fieles.
En la reflexión de esta semana, el Pontífice ha hablado sobre la imagen del Buen Pastor, icono que «desde siempre representa la preocupación de Jesús hacia los pecadores y la misericordia de Dios que no se resigna a perder a ninguno».
Así, en el resumen que hizo en español, indicó que “delante de los Fariseos que se escandalizaban de su relación con los pecadores, Jesús les propone esta paradoja: «¿Quién, si se le pierde una oveja, sería capaz de dejar a las 99 en el desierto para ir a buscarla?” Fíjense –ha indicado– que no dice que las deja en el redil, en un lugar seguro, sino en el desierto, sin agua, sin comida, a merced de las fieras y ladrones.
De este modo, el Santo Padre ha asegurado que “no parece sensato, y sin embargo así hace el Buen Pastor”. No se preocupa, ha precisado Francisco, de poner a salvo primero al resto del rebaño, sino que va de inmediato en busca de la oveja perdida y la lleva a casa sobre sus hombros.
Al respecto, el Pontífice ha advertido de que “muchas veces también nosotros nos escandalizarnos de esta actitud aparentemente inconsciente del Señor, pero hay una razón para actuar así”. Por eso ha señalado que no podemos exigir al Señor que permanezca con nosotros, olvidándose del otro; “nadie puede sujetarle, frenar su amor por todos”. El Papa ha concluido asegurando que “si queremos “tenerle”, debemos seguirle, seguirle allí donde se encuentra la oveja descarriada, si nos movemos con él, también nosotros haremos fiesta al encontrarla y volver juntos a casa”.
A continuación, el papa Francisco ha saludado cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a la peregrinación interdiocesana de Mérida-Badajoz y Coria-Cáceres acompañados de sus Obispos Mons. Celso Morga y Francisco Cerro, así como a los grupos provenientes de España y Latinoamérica.
Así, ha aseverado, “cada uno de nosotros es esa oveja que el Señor lleno de misericordia ha querido cargar sobre sus hombros para llevarla a su casa y, al mismo tiempo, cada uno de nosotros hemos sido llamados a recoger junto al Buen Pastor a toda la grey, para participar así de su alegría”.
Después de los saludos en las distintas lenguas, el papa Francisco ha saludado en particular a los jóvenes, los enfermos y los recién casados. Recordando que el mes de mayo lo dedicamos a la Virgen, ha pedido a los jóvenes que cultiven “la devoción a la Madre de Dios con la oración cotidiana del Rosario”. Del mismo modo, ha pedido a los enfermos que sientan la cercanía de María de Nazaret “en la hora de la cruz”. Y finalmente, ha pedido a los recién casados que recen a la Virgen “para que no falte nunca en nuestra casa en amor y el respeto recíproco”.
Papa Francisco en la audiencia - CTV
El Papa: 'El Buen Pastor no se resigna a perder ninguna oveja'
En la catequesis de esta semana el Santo Padre recuerda que si queremos “tener» a Jesús debemos seguirle allí donde se encuentra la oveja descarriada y hacer fiesta al encontrarla