(ZENIT – Roma).- En la vigila de su viaje a la isla griega de Lesbos, el papa Francisco fue como es su costumbre antes de los viajes pastorales, a la basílica romana de Santa María la Mayor.
El Santo Padre llegó a las 19 horas y se quedó una media hora en el santuario mariano más antiguo del cristianismo. Allí se dirigió a la capilla donde se encuentra el cuadro de la Virgen María, con la advocación de Salus Populi Romani, para pedirle a la Madre de Jesús, que bendiga su próximo viaje.
La Oficina de prensa de la Santa Sede en un comunicado emitido este jueves por la noche, precisó que el Papa le ofreció a la Virgen un ramo de rosas blancas y azules, los colores de la bandera de Grecia.
A la isla de Lesbos llegan miles de refugiados de Oriente Medio y África que huyen de los conflictos y buscan un futuro mejor en Europa.
El Pontífice estará acompañado durante el viaje por el patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I y por el arzobispo de Atenas y de toda Grecia, Jerónimo II.
El Santo Padre saldrá este sábado, 16 de abril, a las 7.00 de la mañana del aeropuerto de Roma y regresará a la Ciudad Eterna a las 16,30.
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