(ZENIT – 2 julio 2019).- “El auténtico desarrollo es aquel que pretende incluir – es inclusivo – pretende incluir a todos los hombres y mujeres del mundo, promoviendo su crecimiento integral, y preocupándose también por las generaciones futuras. El verdadero desarrollo es inclusivo y fecundo, lanzado hacia el futuro”, ha señalado el Papa Francisco.
Hoy, 2 de julio de 2019, el Santo Padre ha difundido un video mensaje de preparación para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, que se celebrará el próximo 29 de septiembre de 2019.
El tema de este año para la jornada, elegido por el Papa, es “No se trata sólo de migrantes”, reforzando su mensaje sobre la inclusión y la no exclusión de todas las personas, independientemente del tiempo que lleven en un país.
En este sentido, el Pontífice ha destacado que el mundo actual es cada vez “más elitista” y “más cruel con los excluidos”. Los países menos desarrollados agotan sus recursos naturales y humanos en beneficio de “unos pocos mercados privilegiados” y, aunque las guerras solo afectan a unos cuantos territorios, la venta de armas la realizan en otros países que, precisamente, no desean acoger a los refugiados que los conflictos provocan.
Así, “quienes padecen las consecuencias son siempre los pequeños, los pobres, los más vulnerables, a quienes se les impide sentarse a la mesa y se les deja sólo las ‘migajas’ del banquete” (cf. Lc 16, 19-21), subraya Francisco.
La Iglesia “en salida”, continuó el Papa, “sabe tomar la iniciativa sin miedo, salir al encuentro, buscar a los lejanos y llegar a los cruces de los caminos para invitar a los excluidos” (Exhortación apostólica Evangelii gaudium, 24), que nosotros excluimos de la sociedad.
La Iglesia celebra la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado desde 1914. Organizada por la Sección Migrantes y Refugiados del Dicasterio para el Servicio Humano Integral, en su página oficial se concibe dicha jornada como «una ocasión para expresar nuestra preocupación por la diferentes categorías de personas vulnerables en movimiento; para rezar por los desafíos a los que se enfrentan y para sensibilizar sobre las oportunidades que ofrecen las migraciones”.