ROMA, 14 julio (ZENIT.org).- El Senado de Italia aprobó ayer definitivamente por unanimidad una ley que prevé la condonación de la deuda externa de los países pobres más endeudados, con la condición que los fondos que de este modo se liberan no sirvan en ningún caso para la compra de armas, sino que sean utilizados para proyectos de desarrollo.
La decisión responde al llamamiento lanzado por Juan Pablo II con motivo de este año santo de condonar la deuda y constituye un estímulo significativo en vísperas de la reunión de los siete países más industrializados (G7) que tendrá lugar en Okinawa (Japón), el 21 de julio próximo.
La iniciativa ha sido promovida por el grupo de «Parlamentarios por el Jubileo», una organización activa en Parlamentos de todos los continentes y de diferentes partidos políticos que está ayudando a la preparación del Jubileo de los Gobernantes, Parlamentarios y Políticos, previsto para el 4 y 5 de noviembre.
«El Parlamento italiano –declara el Grupo por el Jubileo– demuestra de este todo una sensibilidad unánime ante un problema del que depende la justicia y la paz en el mundo. Deseamos que esta iniciativa estimule a los gobiernos del G7 y que sea seguida por los Parlamentos del mundo en este año jubilar en respuesta al llamamiento del Papa».