El documento divulgado por el episcopado, critica al gobierno de Brasilia por otorgar prioridad a la represión de los consumidores de drogas, en lugar insistir y promover programas de prevención.

Los obispos sugieren a las autoridades promover programas culturales, deportivos y recreativos para los jóvenes y aumentar la oferta de trabajo, como camino eficaz para reducir la drogadicción.